Mañana miércoles, 28 de enero a las 20:00 horas, se inaugura en la galería de arte Argar (General Tamayo, 9), una exposición de pintura del artista Martime que lleva por título Sol de invierno y que recoge una serie de paisajes. La muestra estará abierta al público hasta el 10 de febrero, en horario de 18:30 a 21:30 horas, excepto festivos.

Pedro Miguel Martínez Medina, conocido artísticamente como Martime nació entre tubos de pintura y pinceles, lo que hace que para el artista el mundo de la pintura no sea un descubrimiento, sino algo cotidiano en su vida. "Mi primer cuadro, que aún conservo, es una miniatura que pinté con 9 años en el despacho-estudio de José María Molina (cofundador del Movimiento Indaliano), éramos vecinos y siempre que podía, pasaba mucho tiempo con él en su despacho, viendo las manualidades que hacía. El me dio una tablilla, pinturas y un pincel".

Con 14 años participaba en concursos de pintura de Educación y Descanso. "Recuerdo un local de exposiciones junto al Teatro Apolo. Continué haciendo algún que otro cuadro esporádicamente para familiares y amigos, pero mi excesiva timidez y el temor a ser catalogado como el hijo de, enfriaron mi interés por pintar mas seriamente". Fue hace unos diez o doce años, cuando decidió que era el momento de tomárselo en serio, y desde entonces ha participado en exposiciones individuales y colectivas, la última individual fue hace tres años.

"Soy totalmente autodidacta, jamás nadie me dio ninguna explicación, ni siquiera mi padre. Empecé a pintar cuando él ya casi no lo hacía, por su enfermedad y la edad. Tropezando he ido mejorando lo que he podido. Dibujar es una cosa y pintar otra, con el don del dibujo se nace, la pintura se aprende", confiesa este artista, cuyo padre fue el indaliano Miguel Martínez.

Martime tiene claro cual es la pintura que le gusta hacer. "Hago el tipo de pintura que desde niño vi en mi casa, paisajes de Almería, fuente inagotable de rincones maravillosos. Me gustan más la marinas que los paisajes del interior, y dicen que se me da bien el agua". "No me ha dado la tentación de pintar abstracto, aún a sabiendas que es el único camino para competir en un concurso, no me gusta y en la mayoría de casos es el recurso fácil de quien no dibuja", afirma.

"Desde niño conocí a todas las personas de Almería relacionadas con la pintura, famosos y menos conocidos, y he sido testigo de bastantes anécdotas, algunas con Jesús de Perceval bastante graciosas", concluye Martime.