La etapa de Pablo Juliá como director del Centro Andaluz de la Fotografía (CAF) acaba el día 12 de septiembre. La Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía ha decidido no renovar el contrato al fotógrafo como máximo responsable de un Centro que es referente en Europa y por donde han pasado en casi 25 años los mejores fotógrafos del mundo.

Pablo Juliá se marcha con cierto desencanto, ya que su intención era seguir aunque su contrato se cumpliera el próximo lunes. "Me hubiera gustado mucho seguir y sobre todo llegar al 25 aniversario que se celebra en 2017 y poder hacer la gran muestra internacional del Centro Andaluz de la fotografía. La idea era reunir a todos los fotógrafos vivos que participaron en aquel Proyecto Imagina que luego dio lugar al CAF. Aunque solo hubiese haber llegado a esta exposición y haberme ido después", dice.

A sus 67 años, Juliá regresa a Sevilla a "desintoxicarse' del contacto directo con los proyectos que cada día le llegaban a su despacho del CAF". "Necesito tomarme un tiempo para continuar llevando a cabo mis proyectos, ya que tengo muchas cosas en la cabeza. Pero de momento reflexionaré y montaré mi propio proyecto", argumenta.

El responsable del CAF sostiene que a lo largo de esta etapa de casi diez años el Centro ha ido a más. "Somos un centro que lleva a Almería a muchos lugares del mundo. Aun siendo andaluz, la sede se encuentra en Almería. Siempre recuerdo con mucho cariño a Manuel Falces que tuvo la brillante idea de hacer el proyecto Imagina que luego desembocó en el CAF y cuyo 25 aniversario se celebra el próximo año".

"Las exposiciones que ha producido el CAF siempre han sido rentables, porque nunca las hemos dejado dormir, sino que han viajado por Andalucía y por otros puntos de España. La exposición de Nadav Kander se ha visto en 15 lugares, y ahora mismo la tenemos en Bilbao. Es una producción que estrenamos en Almería. Abrimos la nueve sede del CAF con una exposición de Jorge Rueda donde se reunió toda su obra. Es la única producción del artista almeriense que queda en el mundo, porque Rueda quemó el resto de su obra", explica.

La crisis económica también hizo mella en el CAF en los últimos años. "La excusa de la crisis ha servido para que cada año contáramos con menos presupuesto en el Centro Andaluz de la Fotografía. Dejamos de hacer los talleres que tanto éxito tenían, por donde pasaron fotógrafos excelentes y de gran prestigio. Espero que con el paso del tiempo esas actividades regresen al Centro. Obviamente habrá cosas en las que me haya equivocado en este tiempo, pero desde luego la voluntad siempre ha sido ser positivo y ante todo ofrecer lo mejor desde este centro de fotografía que es referencia en medio mundo".

Juliá deja la dirección del CAF pero tiene muy claro que "el CAF lo llevo en mi corazón y adoro esto. Yo he aprendido mucho en este centro y he conocido gente importante, gente con gran corazón. Siempre estaré en el centro Andaluz de la Fotografía, aunque sea viendo su página web todos los días", subraya.

Nueve años y medio al frente del CAF donde vivió el estreno de la nueva sede del Centro con las exposiciones de Jorge Rueda y Morenatti. "Ha sido una etapa de mi vida maravillosa. He hecho muchas cosas en mi vida, pero estos diez años al frente del CAF ha sido lo más bonito que he hecho, rodeado de un equipo fantástico. He hecho en este tiempo lo que tenía que hacer, nos hemos olvidado de amigos y eso a veces cuesta entenderlo. El CAF se ha convertido en un centro de referencia y hemos traído lo mejor que consideramos".

Juliá se marchará este lunes del CAF, no sin antes ofrecer un encuentro con los medios de comunicación, donde hablará de su etapa en este Centro y también del trabajo que ha realizado. Juliá deja una gran huella en una ciudad que lo abrazó nada más llegar hace casi diez años.