Más de 2.000 personas salieron ayer a la calle para reivindicar un conservatorio "digno" para Almería. La convocatoria partía de las asociaciones de madres y padres de alumnos (AMPA) de Música y Danza de este centro. Solicitaban un auditorio y ampliar las instalaciones para que ambas enseñanzas se puedan ejercer en edificios separados y no en el mismo inmueble, como sucede en la actualidad.

A la cita acudieron familiares, alumnos y docentes, estos últimos iniciaron ayer una huelga que mantendrán hoy miércoles en solidaridad con las protestas de las AMPA y del alumnado que la semana pasada entró a clase por primera vez y no coincidiendo con el inicio del curso escolar, días en los que se negaron a entrar en el aula y protagonizaron varias concentraciones a las puertas del Conservatorio almeriense.

El presidente del AMPA del conservatorio de Música, Diego Camacho, aseguraba que la Administración andaluza sigue sin "dar respuesta" a sus peticiones. La semana pasada, dijo que mantuvieron una reunión con la delegada de Educación, Francisca Fernández, quien les aseguró que en la actualidad "no había presupuesto" para el fin pretendido por la comunidad educativa del conservatorio profesional.

La manifestación de ayer partió de Puerta de Purchena y discurrió a lo largo del Paseo de Almería hasta culminar en la plaza de las velas. El alumnado de música acudió a la cita con sus instrumentos mientras que el de danza vestía traje de baile y sus docentes coreaban el lema 'No somos sardinas, somos bailarinas'.

Kina Jiménez una de las profesoras históricas del Conservatorio de Danza que además lleva su nombre, se quejaba ayer amargamente que "llevan 24 años enseñándome los planos del Conservatorio. Nunca he visto un conservatorio que no tenga un salón de actos, si nuestro trabajo es para exhibirlo en público. Porque los políticos hacen eso, nos convencen en los despachos y luego cuando salimos nos han engañado. Vamos a ver si ahora se dan cuenta que esto es una necesidad. La música y la danza nos llevamos muy bien pero nos molestamos".

Antonio García Rodríguez, Niño de las Cuevas, es profesor del Conservatorio de Música y ayer no quiso perderse la manifestación. "Queremos que se den cuenta que Almería también existe, que las enseñanzas de música y danza son también enseñanzas. No es posible que los alumnos estén trabajando en condiciones inadecuadas. Llevamos 25 años de lucha para mejorar las instalaciones del Conservatorio de Música".

Daniel Romero, miembro de la Agrupación Musical San Indalecio de La Cañada, quiso apoyar las reivindicaciones, asegurando que "apoyo a los alumnos y profesores de los Conservatorios porque es una injusticia lo que se está haciendo con esta ciudad. Un Conservatorio que no tenga un salón de actos es una vergüenza. Y que no haya un Conservatorio de Danza es una vergüenza mayor todavía".

En la manifestación había muchas caras conocidas como el guitarrista Francis Hernández, el bailaor Tomas de María, la cantaora Sonia Miranda, el actos Jesús Herrera. La música fue la gran protagonista a lo largo de toda la manifestación.