Las Jornadas de Teatro del Siglo de Oro comenzaron ayer con un gran éxito. Precisamente fue el público más joven el primero en disfrutar de la apertura de estas jornadas con una versión muy particular de El Quijote de Cervantes.

Más de 1.100 alumnos de diez centros educativos de la provincia (procedentes de los IES Bahía de Almería, Compañía de María, Sol de Portocarrero, Albaida, Los Ángeles, El Alquián, de la Escuela de Arte y los centros Compañía de María, Madre de la Luz y CEIP San Fernando) asistieron ayer a la representación de Don Quijote, a cargo de la compañía Teatro de la Resistencia.

Hadi Kurich protagoniza y dirige esta adaptación de la novela más universal de Miguel de Cervantes que, pese a estar concebida para un público adolescente, es apta para todos los espectadores. Don Quijote de Teatro de la Resistencia no se limita a dar vida a los personajes (Quijote, Sancho, Dulcinea) sino que es un pretexto para extraer conclusiones acerca de quién es, en realidad, el dueño de su propio destino.

Es un canto a la Literatura, una obra de meta-teatro en la que actores y público se encuentran estrechamente relacionados. En el transcurso de la obra, los protagonistas requieren la atención y participación de los asistentes.

Les preguntan sobre su lectura del Quijote y les hacen reflexionar sobre la filosofía de vida del protagonista, así como de las justicias e injusticias de las que es objeto. Además, Sancho baja del escenario a buscar a una joven y hermosa Dulcinea de entre el público, así como a tres esclavos que remarán en galera, presos de su libertad y de sus vidas.

Cabe destacar tres aspectos en esta obra: la imaginación con la que es llevada a cabo la interpretación, la justicia y los valores que promueve y las relaciones humanas en todos los ámbitos.

Los escolares se lo han pasado muy bien con las andanzas del caballero de la Triste Figura.

Don Quijote es el primer texto escrito por Hadi Kurich que estrenó Teatro de la Resistencia en España. La compañía fue creada en 1993 por Hadi y Ana Kurich, artistas reconocidos de la antigua Yugoslavia, exiliados a España a causa de la guerra.

Desde su fundación, la compañía ha mantenido dos líneas principales de creación escénica: una, basada en los textos que analizan la realidad social, y la otra, que trata de acercar el teatro clásico al público contemporáneo.