Cultura

‘Repudiados’ retrata con sobriedad el drama de los refugiados en el Apolo

  • El flamenco y la danza contemporánea se dieron la mano en esta obra del ciclo ‘Delicatessen’

Las protagonistas de 'Repudiados' en el Teatro Apolo

Las protagonistas de 'Repudiados' en el Teatro Apolo / Diario de Almería (Almería)

“Cuando cruzaba el desierto de Gobi, temiendo morir, pensaba que nadie en el mundo se preocupa. Parecía que sólo las estrellas estaban conmigo”. Con esta frase de Park Yeon-Mi, activista en la defensa de los Derechos Humanos a partir de su huida de su Corea del Norte natal a China hace diez años, sitúa Repudiados el espíritu de su despliegue físico con el que denunciar la situaciones de millones de refugiados y perseguidos en todo el mundo.

Una obra que se pudo disfrutar el jueves en el Teatro Apolo de la capital gracias al programa Delicatessen, del ‘Otoño Cultural’ del Área de Cultura, Educación y Tradiciones del Ayuntamiento de Almería, coordinado por Axioma Teatro.

Avalado con varios reconocimientos como Lorca de Andalucía, ACA, Bienal de Flamenco de Sevilla, Feria de Palma o Feria CLM, Repudiados emplea la expresión corporal de la danza contemporánea, pero con un fuerte componente de flamenco, para representar escenas asfixiantes y opresivas. Desde la incomprensión y la incomunicación, pasando por la reclusión, el aislamiento o el intento de fuga desesperada a través del mar.

Es una de las muchas escenas escalofriantes. Una voz en off recuerda: “el Mar Mediterráneo es considerada la ruta migratoria más mortal del mundo”.

Las cinco protagonistas, sobrias y distantes en su papel de obligatoria deshumanización impuesta por las circunstancias, se lanzarán al agua que les sorprenderá con una tormenta bien conseguida con la iluminación cenital de los fríos focos de luz. Luz artificial, no luz de esperanza.

Disparos, peleas fronterizas como las de Austria o Turquía, el incumplimiento del cupo de refugiados comprometido por Europa, presentado como una deuda pendiente, nana por tonás con base electrónica y acoples ‘noise’. Intensidad de principio a fin hasta llegar al off final, con el escenario totalmente oscuro, recordando pasajes de violación por parte de soldados de Naciones Unidas. Un final tan gélido como la pasividad.

“Hemos decidido tratar una dramaturgia de actualidad: “Los Refugiados”. El título que planteamos para la obra es ‘Repudiados’, que en el idioma español fonéticamente suena parecido a Refugiados, pero significa totalmente lo contrario. Como artistas queremos que nuestra creatividad esté en base a nuestra vivencia, nuestras experiencias y no convertirla en algo banal”, explican desde Varuma Teatro.

Fundada bajo la dirección de Jorge Barroso Bifu en 1999, la compañía ha sido categorizada por la crítica como de eclecticismoradical, consiguiendo a lo largo de su trayectoria un lenguaje propio que caracteriza a sus trabajos. En ellos se pueden encontrar una propuesta escénica ligada a la estética, incluso presentadas desde disciplinas que no pertenecen a las artes escénicas y siempre mostrando un arte subversivo e inconformista.

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