Almería, 9 de diciembre de 2021. Estimado Piñeiro, me atrevería a decir que desde que la UD Almería presidida ya por Turki Al-Sheikh intentó el fichaje de Raúl Guti, quien finalmente aterrizaría en el Elche, los Almería-Zaragoza o viceversa se han convertido en todo un Clásico de Segunda División por las emociones que despierta en las aficiones de cada conjunto. Un pique que se manifiesta más desde La Romareda hacia el Mediterráneo que a la inversa y, como muestra, el botón de que la directiva árabe ha tendido puentes con el cuadro aragonés bien facilitándole cesiones o la adquisición de jugadores con pasado rojiblanco y la carta de libertad bajo el brazo. Ahí sin ir más lejos están Petrovic o Vada de la etapa más reciente, como bien apuntas, o Giménez y Narváez, que hicieron un gran papel a las órdenes de FF. Sin olvidar a JIM, que por aquí pasó con más pena que gloria pero que allí ha tenido un efecto resucitador. Recurriendo al clásico, espadas en todo lo alto.

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