Si sos argentino y vivís en algún lugar de la galaxia, decime que se siente ganarle a Brasil en el Maracaná en una final de Copa América. Si te corre sangre por las venas decime que se siente mientras la pelota vuela por el cielo mais grande do mundo cuando una salida en falso del portero Ederson permite al Fideo Di María, -cuyos antepasados vinieron en los barcos-, marcarse una vaselina de esas que te dan títulos continentales. Si sos argento y estás parado en alguno de los lados de la grieta, decime que se siente que la zanja desaparezca por un rato para abrazarte con el de enfrente, solamente porque Argentina salió campeón.

Vos que al igual que yo, ya casi no nos acordábamos de lo que era levantar un trofeo pero les contamos a las nuevas generaciones lo que sentimos en el ´78 y en el ´86, inclusive en el mundial del ´90, en Italia, cuando un tipo con el tobillo hecho una sandía y el 10 en la espalda, le da un pase de gol al Pájaro Caniggia para mandar a casa a la verdeamarela. Si naciste hace 28 años como el Dibu Martínez, decime que se siente ver a tu equipo campeón, porque nunca antes lo habías visto.

Que se siente ponerle sonido y contenido a las historias que te narraron los mayores, a las revistas que guardaba tu viejo, solo para que vos supieras que él no estaba fantaseando. Qué sentís cuando se gana una final de ocho disputadas. Que se siente ver a Messi quitarse la mochila que el enano fascista argentino depositó en sus espaldas al grito de pecho frío. Al fin y al cabo vos tampoco cantás el himno y no le haces un gol a nadie tirado en el sofá de tu casa, tomándote una fresquita. Que se siente que tus hijos crezcan lejos y griten los goles junto a vos, como si hubieran crecido en tu barrio.

Decime si no te sentís importante por un rato porque sabés que serás portada de todos los periódicos del mundo que mañana hablaran de ese país del Cono (coño) Sur. Que no te importa levantarte a las dos de la mañana porque hay que bancar a los pibes. Que no sentís el cansancio, que solo sentís emoción. Dale, decime que se siente.

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