Análisis

Víctor Pérez

2020: Desembarco total en Nueva Andalucía

Nueva talla, nuevo paso y toda la carne en el asador a la conquista de los feligreses del barrio

Tras un Domingo de Resurrección para el recuerdo, se avecinan innumerables cambios en la Hermandad del Resucitado, la que pone el punto y final a cada Semana Santa en Almería.

Para el próximo 12 de abril de 2020, la procesión lucirá un aspecto rotundamente distinto al que ha tenido hasta ahora con la sustitución de la imagen titular que tallara Coullaut Valera por una de nueva factura que se encuentra en proceso de producción por el imaginero hispalense José María Leal Bernáldez. Dicha talla sacra, será el centro y motivo de un misterio que se completa con otras 3 imágenes y que se completará durante los próximos años. Eso sí, en el seno de la Hermandad se trabaja sin prisa y se prefiere dilatar el plazo de ejecución de cada nueva cuestión, si con ello se tiende a garantizar un conjunto escultórico de la calidad que merece la Semana Santa de Almería.

Pero eso no es todo, porque desde la Hermandad se trabaja igualmente para que a finales de 2019 llegue a Almería un nuevo paso procesional para portar la nueva imagen del Resucitado. Pensando en el futuro misterio completo, se tratará ya de un paso notablemente más grande que el actual, contando con hasta ocho trabajaderas. El carpintero de Los Palacios, Enrique Gonzálvez, será el encargado de ejecutar la primera fase del mismo, consistente en la ebanistería, quedando pendiente para años venideros la elección del tallista y el proyecto concreto para el desarrollo del canasto del paso, así como respiraderos y demás elementos ornamentales.

Además de lo dicho, el otro gran frente de la Hermandad es el asalto definitivo, si me permiten la expresión, al barrio de Nueva Andalucía, la feligresía de Nuestra Señora de Montserrat, parroquia en la que hace ya años viene trabajando la Hermandad pero de cuyos muros a duras penas ha logrado trascender, si bien dentro de los mismos el mensaje tampoco ha sido todo lo contundente que aspira a ser. Ello tiene una explicación sencilla: ni hay ninguna imagen de la Hermandad en la Parroquia, ni la procesión del Domingo de Resurrección se acerca al barrio en lo más mínimo. Esto debe irse subsanando a la mayor inmediatez con el desembarco de la nueva imagen titular y todo lo que aportará a la parroquia, con el nuevo paso que se quiere dejar en un local del barrio -cuestión en la que se trabaja sin prisa pero sin pausa-; y muy especialmente explorando todas las vías posibles que lleven a que la Hermandad procesione desde la Parroquia de Nuestra Señora de Montserrat o su entorno má próximo, dadas las dificultades arquitectónicas que el propio edificio plantea.

Todas las ilusiones y esperanzas de la Hermandad y sus cofrades se centran, por lo tanto, en las acciones a desarrollar para multiplicar su impacto entre los vecinos de Nueva Andalucía a los que quieren legar una devoción de notable magnitud, como es el Señor de la Vida, y una procesión con la que el barrio sea capaz de trasladar a toda la ciudad el mensaje de júbilo y plenitud que para toda la cristiandad supone la Resurrección de Cristo. Todo parece indicar que en unos meses la pelota pasará al tejado de los vecinos de este populoso barrio de Almería.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios