Tras el ligero avance del PIB de España en el 4T2020 (0,4% trimestral), apoyado principalmente en el impulso del gasto público, la evolución de la pandemia desde principios de año reduce las expectativas de crecimiento de nuestro país en el primer semestre de este año.

Los indicadores adelantados de la OCDE y los PMIs confirman el moderado ritmo de recuperación de la economía española respecto al resto de las principales economías de la Eurozona. A su vez, el repunte de la actividad en la UE muestra un menor dinamismo frente a EEUU, debido a los menores niveles de restricción de la movilidad, las ayudas fiscales directas sin precedentes y un mayor avance de su plan de vacunación.

Ante el riesgo creciente de que Europa afronte una cuarta ola de la pandemia, es clave acelerar el proceso de vacunación para controlar la crisis sanitaria y apuntalar la recuperación socioeconómica.

Tanto el consenso del mercado como el Banco de España rebajan sus expectativas de avance del PIB en 2021. Así, el último consenso del panel de Funcas proyecta un avance del PIB de un 5,9% anual, 0,4 puntos porcentuales menos de lo estimado anteriormente, y en línea con las últimas previsiones de la OCDE (5,7% anual). El Banco de España estima un crecimiento económico de un 6,0%, frente al 6,8% anterior. No obstante, el avance del PIB podría limitarse a un 3,2% anual en caso de un rebrote del virus de mayor intensidad y un endurecimiento de las medidas de contención por encima de los niveles actuales. En este escenario, la tasa de paro media en 2021 podría elevarse por encima de un 16% de la población activa, quedando por encima de sus niveles prepandemia hasta 2023.