E DITOR de quijotesca actitud, vinculado al mundo de la edición a través de la Librería Cajal y la Biblioteca de Autores Almerienses, durante las décadas de 1970 y 1980 Artero participó activamente en la puesta en marcha en Almería de actividades vinculadas al libro y la fundación de publicaciones periódicas.

Secretario de la comisión organizadora del V Centenario de la Imprenta en Almería celebrado en 1974, Artero fue uno de los principales promotor y mantenedores de la Feria del Libro de Almería. Un evento de cuya organización se ocupó desde su primera edición, en 1975, hasta 1980, y en el que participó con su Biblioteca hasta su fallecimiento.

A finales de los años setenta formó parte del grupo fundador del proyecto editorial Andarax, Artes y Letras. Una revista cultural cuyo primer número vería la luz en abril de 1978 y a la que estuvo vinculado Artero como redactor jefe durante la primera época de la publicación, hasta 1983.

Antes de la desaparición de Andarax, Artero se embarcaba en un nuevo proyecto editorial: La Crónica. Un diario cuyo primer número llegaba a los quioscos almerienses el 28 de julio de 1982. Miembro fundador de aquel periódico independiente, como rezaba en su cabecera, Artero formó parte del Consejo de Administración de La Crónica, como consejero-delegado, hasta agosto de 1983.

También en el ámbito de la edición andaluza tuvo Artero protagonismo, participando en la fundación, en 1982, de la Asociación de Editores de Andalucía. Un organismo dentro del cual ocupó el cargo de Secretario, entre 1982 y 1984, y Presidente, durante el bienio 1984-86. Periodo en el que, a través de la Asociación, puso en marcha la Biblioteca de Cultura Andaluza.

En 1990 era nombrado director de la revista trimestral El libro andaluz. Órgano de difusión de la Asociación de Editores de Andalucía al que permaneció vinculado hasta su fallecimiento.

*Director de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino