El Almería de Rubi. No solo es el líder de Segunda División, sino el mejor equipo de la historia en estas primeras diecisiete jornadas. El inicio con más puntos (40), superando el récord del Atlético de Madrid 2001/02, el Real Betis 2010/11, el Elche 2012/13 o el Cádiz 2019/20 con un punto menos (39). También encadena la mejor racha histórica de victorias del club unionista alcanzando los siete triunfos consecutivos, superando las seis de José Gomes después de vencer al Real Valladolid de Pacheta. Un fallo en el sistema estadístico con una explicación en el apartado futbolístico. La adaptación a los distintos contextos de partido y las herramientas que el técnico barcelonés le ha dado a una plantilla con jugadores con capacidad de rendir en varias posiciones (Portillo, Curro, Pozo o Samú). Unos conceptos conocidos, pero es que el sábado también varió el sistema en la primera vez en la temporada en la que se logra remontar un resultado adverso tras las derrotas en Ponferrada y Eibar. En ese reajuste se juntó a Dyego Sousa con Umar Sadiq para compartir el ataque rojiblanco, ser referencias y tener impacto en esos minutos. Claro, y más allá de los datos, la táctica y la solvencia, las sensaciones son incontestables. Un equipo camino a la historia, dirección al cielo. Un Almería que brilla con luz propia y que ha añadido a sus señas de identidad el factor de sumar de tres en tres como costumbre semanal. La vuelta de Largie Ramazani y el retorno en los próximos partidos de Lucas Robertone serán nuevos argumentos para que el equipo siga en sexta marcha. En estos momentos, parece complicado frenar a este conjunto en un campeonato expectante a ver cuál será el antídoto para no permitir otra victoria almeriensista. Rubi ha conseguido que esta perfección se haya convertido en una modélica rutina de trabajo fin de semana a fin de semana. La Rubineta es imparable. Disfruten de cada partido de este equipo.

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