Dos entrevistas. Una hecha en un periódico referencia a nivel nacional, El País, y otra en el medio de referencia de los almerienses, Diario de Almería. Enrique Ortego habló con Gutiérrez [Guti, para entendernos, aunque él pidió en una rueda de prensa cuando todavía eran presenciales, que no se le llamara por el diminutivo] y un servidor con Kalu Uche. Las respuestas demuestran quién es un ídolo y quién pasó por el Mediterráneo dejando mucho que desear. "Almería es mi casa, es una ciudad a la que quiero mucho. Ojalá pueda ver al club en Primera el año que viene, de momento está muy bien clasificado". Eso lo dijo un torero, Curro Romero como lo llama Ramón Gómez-Vivancos. "Era un proyecto muy bonito, pero sabía que tenía un riesgo grande. Había mucho dinero metido. El objetivo era subir en un año y era consciente de que un resultado negativo podría ser decisivo. Un presidente fanático del fútbol. Se fue injusto conmigo", palabras de alguien que nunca llegó a conectar con la afición ni se hizo con el equipo. Basta con recordar lo que ocurrió después del 1-1 en Soria. La diferencia es clara. Aunque Kalu desesperara a veces con su parsimoniosa manera de presionar, era una barra rojiblanca de la camiseta más . Y Guti no.

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