Las restricciones a la movilidad decretadas el pasado año para contener la pandemia de covid generaron, entre otras cosas, un importante agujero en las cuentas municipales, como consecuencia de la disminución del uso del transporte público, que se estima que fue del 40% sobre un año normal. Para resarcir a los ayuntamientos de aquel daño y contribuir a la estabilidad financiera de una administración, la local, que es esencial para el buen funcionamiento de los pueblos y ciudades, el Gobierno de España ha aprobado ayudas para las entidades locales que vieron reducidos sus ingresos por el uso del transporte público en 2020.

En la provincia de Almería, los ayuntamientos beneficiados por estas subvenciones han sido el de Mojácar, el de El Ejido y el de la capital, que ingresará casi 2 millones de euros. Una vez más, el Gobierno de España ha echado un capote al Ayuntamiento de Almería, ayudándole a sufragar los gastos derivados del covid con dinero contante y sonante. Curiosamente, el alcalde de la ciudad ha guardado silencio sobre esta ayuda, de la misma forma que de aquí para atrás tampoco se le ha escuchado elogio alguno al trabajo que está realizando el Gobierno de España para mejorar edificios y espacios públicos de la ciudad como pueden ser el Hospital Provincial, el Cable Inglés, la antigua Estación de Tren o la prolongación del Paseo Marítimo, a la misma vez que concluían las obras del soterramiento del paso a nivel de El Puche.

El compromiso demostrado por el Gobierno de Pedro Sánchez con la ciudad de Almería contrasta con el desprecio con el que otro gobierno, en este caso el andaluz, viene tratando a los vecinos y vecinas de la capital almeriense desde la llegada de PP y Cs a la Junta. En este tiempo, por poner algún ejemplo, no se ha abierto ni un solo nuevo centro sanitario o educativo más allá de lo que dejó encarrilado el anterior gobierno socialista.

De hecho, en estos dos largos años, el gobierno de las derechas en Andalucía se ha dedicado exclusivamente a vivir de esas rentas y a echar el cerrojo a instalaciones tan emblemáticas y necesarias como el hospital de la Cruz Roja, el Centro de Actividades Náuticas, el CADE del Puerto de Almería o el albergue juvenil. Para ello, Moreno Bonilla ha contado con la complicidad del alcalde de Almería, que ha hecho la estatua mientras él iba cerrando servicios públicos en la ciudad.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios