Desayuno con diamantes

José Fernando Pérez

Abecedario sanitario

Nadar contracorriente o a favor de ella, pero buscando siempre el aliento en la mirada del que te ayuda

Abrir Avanzar y mejorar en la calidad percibida, la que se puede ofrecer en toda la extensión del término, amedrentando el olvido con el que ahuyentar los fantasmas para descubrir nuevas formas de hacerlo y poder ampliar los horizontes, redibujando con los medios propios otros escenarios que son posibles.

Buscar una razón para seguir adelante, la que no debe olvidarse nunca, a pesar de las cirunstancias advesas y las maldiciones que sobrevolaban. Consultar las dudas y encontrar las respuestas, sabiendo que las mismas eran las lógicas, que la navaja de Ockham tenía razón, una vez más.

Dar voz a todos permitió descubrir talentos ignotos, que andaban silenciados por un volapié caído que obstaculizaba el acceso.

Enorgullecernos de haber podido transformar masa madre en consistente alimento que sacie la necesidad, piadoso sentido que no debiéramos olvidar nunca. Facilitar siempre mensurando los términos, opacificando las tinieblas a modo de encerado difuso y limpio donde siempre poder reescribir.

Garantizar la seguridad de todos, tanto pacientes como profesionales y a su vez humanizar, consentir y valorar qué podemos hacer y qué debemos hacer.

Innovar con métodos y desarrollos propios con una sola justificación: que todo lo hacemos por y para el bien de todos.

Liderar la mejora en el continuo, en el día a día, en las cosas pequeñas y en las grandilocuentes expresiones que chocan contra la fragilidad del momento.

Nadar contracorriente o a favor de ella, pero buscando siempre el aliento en la mirada del que te ayuda. Olvidar por un momento el porqué y recordar el para qué y opinar abiertamente, exponer y adquirir de tu razón, la mía.

Pisar duro y fuerte en aquellos momentos en que todo temblaba, queriendo ser lo mejor que podemos aspirar a ser y saber que no estamos solos. Soñar, volar sin alas, planear a ras de suelo, levantar y picar de nuevo. Ratificar que el esfuerzo es de todos y que titubear no se no estuvo permitido. Unificarnos bajo un lema común, valorar el esfuerzo colectivo, pues zaherir, nunca estuvo en nuestro vocabulario. Todo ese abecedario nos lleva a uno de los mayores reconocimientos que podiais obtener.

Cercanos quedan los tiempos de angustia, miedo y desánimo, y aunque cansados, habéis sabido crecer y ser un Hospital Óptimo en Calidad Asistencial y Sanitaria, orgullo de los almerienses y de sus profesionales.

Enhorabuena HAR Toyo.

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