Habitualmente, las reseñas que recibimos de las reuniones de personas "sesudas y preocupadas" por el medio ambiente se refieren, casi en exclusiva, a cómo van a reducir las emisiones de CO2 y de cómo van a favorecer el uso de "energías alternativas", expresión que no tengo nada clara, porque la energía, energía es.

Concisos, pero ni claros, ni coherentes. Y así, no vamos a ninguna parte. En primer lugar, cuando decimos que un aparato es ecológico, porque consume menos electricidad, debemos aclarar cuánta se ha consumido en fabricarlo, no vaya a ser que por las mejoras introducidas, la fabricación se complique tanto que el balance energético entre lo ahorrado y lo consumido nos salga negativo.

Otro ejemplo: un automóvil eléctrico. Estos vehículos llevan baterías eléctricas recargables, que como su propio nombre indica, hay que recargar. ¿De dónde sacamos la electricidad para recargarlas? ¿Qué repercusión ecológica se supone que tendrá la fabricación, instalación y mantenimiento de los "surtidores de electricidad"? ¿De dónde se está sacando el Litio necesario para fabricar las baterías? ¿Cómo se reparte el beneficio que arroja la extracción y venta de ese Litio? ¿Qué pasa con el medio ambiente del entorno de donde se extrae el Litio? ¿Se está reparando a la vez que se extrae el Litio? Por cierto, que en "la Argentina", como yo he oído siempre en mi familia materna cuando hablaban del pariente que teníamos allí, hay una región un poco molesta por la desmedida extracción de Litio que están haciendo "a cielo abierto" en una hermosa zona virgen del país. Otro día hablaremos de ese tema.

Ahora precisamente, se está celebrando en Barcelona el Mobile World Congress 2021, así que vamos a decir algo de los móviles. ¿De verdad es necesaria tanta inmediatez en la recepción de mensajes y envío de mensajes? ¿Sabemos la electricidad que gastamos con los "guasas" o con los correos? ¿Somos conscientes de la cantidad de "cacharros" de tierra: antenas, y del espacio: satélites, que ponemos en funcionamiento cada vez que le damos al "botoncico de send"?

Además, si fuéramos buscadores de oro del Oeste, y perdiéramos una "pepitilla" de oro, seguro que nos molestaríamos bastante. Pues bien, ¿sabemos la de metales nobles, tales como plata, oro, platino, que desperdiciamos cuando tiramos un móvil?

Una confidencia: estoy convencido de que los políticos ven, y observan con atención, cómo derrochamos, y esa es una de las razones por las que no paran de subir los impuestos. ¡Tengamos vista y no derrochemos, que nos controlan!