El pasado sábado se celebró en La Moncloa un Consejo de Ministros. Seguramente debería calificarlo de extraordinario, pero como no me se ni las reglas de la escritura periodística, ni lo de extraordinario para las jerarquías, pues lo dejo así. Más que nada, porque soy de la opinión que, de tener algo extraordinario un consejo de ministros, son las consecuencias de las medidas adoptadas, y eso solamente el tiempo lo dirá.

Así que, a lo que vamos. En sábado y a las puertas de las manifestaciones a favor del Derecho a la Vida, de otras cuantas que hay convocadas en Madrid, y con la Policía esperando la visita de personajes de allende nuestras fronteras, y no me refiero a dignatarios, ya que me refiero a que parece que esperan a "animadores de las calles" que quieren animar la celebración de la Cumbre de la OTAN de la semana que viene (estoy escribiendo en domingo), además se ha celebrado el dicho Consejo de Ministros. ¿Para qué? ¿Por qué? Dicen que para poder cobrarles a las eléctricas el aumento del impuesto de sociedades, ya que eso tiene trámites, y si no lo hacían así no podían hacer la norma antes del 31 de diciembre. También dicen que están muy preocupados por nosotros y no quieren que suframos con la inflación: se lo dicen, entre otros, a mi generación. Todavía recuerdo cuando en los tiempos de Suárez quise negociar una letra a 4 años, y el banco me pidió la letra y dinero para negociarla. Pero calma que ya sabemos la ley de Murphy, que dice que: "cualquier situación susceptible de empeorar, empeorará". También me ha parecido escuchar ¡que van a subir algunas pagas!: ¿de dónde? Digo yo que con la deuda que tiene España, con el P.I.B. que hemos tenido en los 3 primeros meses del 22, y con los intereses que parece que van "pa'rriba", pues bastante va a haber con que sigamos cobrando lo que cobramos y no nos falte: ¡Virgencica, que me quede como estoy! Que decía mi colega.

En realidad, yo prefiero menos reuniones de cualquier tipo y más pragmatismo. Lo de reunirse está bien, pero con la de comunicaciones que hay hoy día, digo yo que estarán al corriente de lo que tienen que hacer. Soy consciente de que alguien me puede decir que hay circunstancias extraordinarias: falta de gas, de cereales y preocupación "por la situación". Pero eso no es de ayer, eso es del 20 de febrero pasado, que empezó "el jaleo de Ucrania" y sus consecuencias, amén de otros temillas de suministro de gas por El Alquián, que se han complicado, parece ser, por otras razones.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios