El Ayuntamiento de Almería anuncia que va a repartir 200.000 euros (200.000) en bonos descuento para los clientes de los comercios tradicionales de toda la ciudad: la mitad en bonos de 10 euros y la otra mitad en bonos de 20 euros, que se entregarán a los comerciantes para que los descuenten del importe de las compras. Bienvenido sea este programa de ayuda aunque resulte algo tardío. Siempre se ha dicho que los españoles pensamos bien, pero tarde. Así que lo de esta retraso de nuestro Consistorio no es algo exclusivo de Almería: en general somos más lentos en reaccionar que el antiguo "Corto de Santa Fé" (¿Recuerda alguien que Almería tuvo "cercanías" de la Renfe?). También es general la "costumbre" de volcarse con ayudas a las grandes superficies, que son culpables en parte del deterioro del pequeño (o mediano) comercio de proximidad, cercanía o tradicional. Esas ayudas suelen ser urbanísticas, fiscales, administrativas …y/o publicitarias, como los seis kilómetros (la longitud de sesenta campos de fútbol, que es la unidad de medida más utilizada por los medios de comunicación) de alfombra roja que el Ayuntamiento colocó desde el centro de la ciudad al Centro Comercial Torrecárdenas en el día de su inauguración (ahora se dice arranque en vez de inicio, comienzo, principio, debut, inauguración…¡Que se note que enriquecemos el lenguaje!).

Este apoyo al comercio tradicional ahora nos cuesta el doble: a lo que se gastó en las citadas ayudas a los grandes, hay que sumarle las nuevas a los pequeños. Decimos nuevas porque ha habido otras ayudas, aunque no sabemos si fueron útiles: conciertos de músicas más o menos ruidosas (generalmente más), castillicos hinchables para los chiquillos y piscinas no menos hinchables a las que las madres llevaban a bañar y lavar a sus niños. El estruendo musical y la cutrez de las instalaciones infantiles más que atraerlos, espantaban a buena parte de los posibles compradores.

Otro proyecto municipal reciente para dinamizar (otros dicen dinamitar) el Paseo -y el Centro Antiguo- es llevarse al citado Paseo la mitad del mercadillo de los "hippies" que siempre se ha instalado solo en la Rambla. Esta iniciativa le dará categoría, relevancia y prestigio a la ya deslumbrante decoración de estrellas amarillas y azules de la reciente ampliación de la acera izquierda, anexa a la vía ciclista. ¡Sigamos por ahí!.