La cultura es la base del desarrollo de la sociedad. En Almería disponemos de una riqueza, en este sentido, muy amplia y asentada; pero aún precisa mayor estudio, difusión, integración, "convivencia", acercamiento e incluso expresión. Para ello, y para otros procedimientos, surgió la necesidad y la realidad del Plan Estratégico "Almería 2030" desde el Excmo. Ayuntamiento de Almería, y, en este caso, su vector cultural de la mano de D. Juan Manuel Martín Robles (director del Museo de Arte de Almería y de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino). Hasta el momento, hemos podido analizar la situación capitalina estableciendo, en palabras muy sencillas, un diagnóstico inicial general. Quiero que sepan que es la primera vez que, hasta el momento, puedo hacer pública mi verdadera ilusión compartida al respecto. He sido testigo y partícipe de grupos de coordinación que han desembocado en paralización, abandono, desacuerdo, disputa y hasta "ficción" (si me permiten incluir el último vocablo dentro del contexto real).

La ciudad de Almería precisa un análisis global y profundo desde verdaderos cimientos culturales y desde la "institucionalidad", y el Excmo. Ayuntamiento de Almería ha mediado desde la responsabilidad para tal efecto, por lo que nadie debería desestimar, y mucho menos desprestigiar, el trabajo de estas comisiones que pueden y deben llevarnos al desarrollo y crecimiento futuro de nuestra increíble ciudad. Una categoría que se ha acogido dentro del vector es la de "Creatividad e Innovación"; una sección crucial para la prospección, originalidad, investigación, adaptación, combinación, modificación, potencialidad y novedad en sí, dentro de un marco siempre compartido e integrador, estrechando manos en todo momento con aquellas parcelas que se encargan de estudiar aquellos aspectos ligados a nuestra "historia pasada" y "tradición". Aún queda mucho camino por recorrer, pero no me cabe duda de que, entre todos, lograremos llevar a Almería al modelo que merece y precisa. La ciudadanía merece saber, igualmente, que se está trabajando por y para ello de verdad; desde la experiencia, profesionalidad, seriedad, colectividad y objetividad.

La capital merece sólidos "puentes" (consensos) para su desarrollo, y no impedimentos. La capital merece la funcionalidad global de este proyecto cultural, y se la vamos a dar...