Opinión

ana martínez labella

Luz verde a 'El Patio'

Entonces llegó a pasar factura al Ayuntamiento por el realojo de los vecinos que hubo que atender

Uno Cuando hay voluntad, las cosas salen adelante. Prueba de ello es el visto bueno de la Junta de Andalucía a la propuesta de delimitación como Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) de la zona de Pescadería y Avenida del Mar, lo que va a suponer un gran avance en la tramitación y redacción de los proyectos presentados por el Ayuntamiento a la convocatoria de ayudas del Gobierno regional para la rehabilitación de las viviendas del edificio de 'El Patio' y del conjunto de viviendas municipales de la calle Estrella Polar y para la urbanización de la zona de 'Torreones'.

El programa de Áreas de Regeneración y Renovación Urbana en Andalucía (ARRU) brinda la oportunidad a los ayuntamientos andaluces de más de 50.000 habitantes de optar a subvenciones para la rehabilitación de viviendas en barriadas, poniendo a disposición de las entidades locales casi 40 millones de euros.

La inversión prevista en nuestros proyectos es de casi tres, de los que la subvención de la Junta alcanzará casi un 70 por ciento, mientras que el Ayuntamiento aportará algo más del treinta.

De esta forma, bien se puede decir que la solución al problema de las viviendas de 'El Patio' está más cerca gracias, en gran medida, al cambio en las políticas de vivienda que se ha producido con el Gobierno de Juanma Moreno, como así lo demuestra que, por primera vez, los ayuntamientos podremos optar a obtener recursos para acometer mejoras de estas características no solo en el parque de vivienda municipal, sino también en viviendas privadas que se encuentran en una situación complicada en base a las situación socio-económica de sus inquilinos, como es el caso de 'El Patio'.

Conviene recordar en este punto como la misma administración, en manos entonces del gobierno socialista, llegó a pasar factura al Ayuntamiento por el realojo de parte de los vecinos que hubo que atender ante la situación de riesgo del edificio.

Un gobierno progresista que decía preocuparse por la gente. Actuaciones como esta corroboran el necesario cambio de gestión que necesitaba la Junta tras casi cuarenta años de hegemonía socialista. Y es que hemos pasado del gobierno del eslogan al gobierno de los hechos. Y eso se nota.

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