TIEMPOS difíciles llegan en esta mercado de invierno para un Polideportivo Ejido al que no le ha dado tiempo a llegar a las tan esperadas rebajas para tratar de encontrar alguna ganga con la que remozar su plantilla. Y es que los celestes se encuentran en un estado de rebajas permanentes debido a la grave situación económica que atraviesan que ya está animando a muchos clubes a tratar de pescar en el caladero ejidense. El primero en hacerlo ha sido el conjunto del Elche, que ha decidido reforzar su defensa con el central francés Johann Charpenet. Creo que no voy muy desencaminado si les digo que ha sido, posiblemente, uno de los centrales más completos y de mayor calidad que han pasado por el Poli. Y, claro, la calidad tiene un precio que cada vez está más lejos del alcance tanto del Poli como de la mayoría de los equipos de una Segunda B acuciada por las deudas. Merci beacoup, Charpe. Y creo que el Elche podría ir planteándose lo de cambiar su equipación franjiverde por la de celeste que a buen seguro le resultará mas familiar no solo a Charpenet sino también a Usero, Tena, Juli y Molina que también están en sus filas. Con esta marcha y la lesión de Juan López el eje de la zaga se queda bajo mínimos. Aunque también es verdad que esta salida habrá contribuido a reducir algo la deuda que arrastra el club. Circunstancia ésta que, nos guste o no, es el principal problema que tiene que afrontar el Poli por encima incluso de las cuestiones deportivas. Y, en este sentido, también hay que analizar la más que probable marcha de Nogués. Tal vez no sea lo mejor ni lo más oportuno en términos deportivos para un equipo que el catalán ha conseguido encajar definitivamente y que va a más. Pero en la situación actual del conjunto celeste difícil, por no decir imposible, será retenerle. Así las cosas, el Poli afronta un duro invierno en el que tendrá que adaptar sus aspiraciones deportivas a los ajustes que se vea obligado a hacer para poder subsistir.