Pospandemia

El mundo de la pospandemia es el mundo de la vuelta al mito, y la ruptura con el logos. Una retroceso histórico

Tal vez sea precipitado hablar ya de una pospandemia aunque no está mal comenzar a elucubrar cómo será la vida posterior a ella, ahora que estamos acercándonos a una situación más o menos controlada. Obviamente en términos médicos y estadísticos ya se notan los cambios. Cuando acaben los protocolos habremos notado el paso del virus y hasta comenzaremos a pensar si aquello de las vacunas de verdad tiene efectos secundarios a largo plazo. A nivel económico no encontraron éxito las teorías sobre el fin del neoliberalismo y el capitalismo global, todo lo contrario el sistema se ha fortalecido amen de dejar una crisis económica en vigor y otra futura: la proveniente de los créditos concedidos a las sociedades y que no han sido reintegrados, que dejará cifras negativas también. Los sistemas políticos también se han fortalecido, los geopolíticos también. En contra de una recesión en los canales por donde se mueve el poder, las grandes sociedades transnacionales han vuelto a ser las oligarquías permanentes otra vez. En términos morales está mucho peor la situación. No solo no ha habido un cambio moral sino que lo que llamamos nueva normalidad es la repetición de la antigua normalidad. Las hipocresías, los estreses, las intolerancias han copado el espacio ético de la ciudadanía. Mis esperanzas de cura de humildad, cuando apareció el miedo al virus y todos aplaudíamos en la ventana, se esfumaron poco a poco dando paso a la vida que teníamos antes. Nadie ha aprendido la lección. Oportunidades como esta para forzar giros históricos, en esta ocasión, no ha servido para nada. No se ha gestado el gran cambio, la gran revolución moral, que se esperaba desde la crisis económica del 2009 y que tampoco se produjo. Claramente los posmodernos somos sumisos y esclavos de las manipulaciones y de nuestra ignorancia cultural. Ya no somos personas capaces de cambiar la historia. Por todo eso nada ha cambiado en el fondo y tan solo hemos pasado una enfermedad global, una pandemia global, a la que ya hemos tratado como algo pasajero. Amén de consecuencias médicas y económicas las estructuras sociales siguen siendo las mismas y el ser humano continua su historia perdido entre mitos que cada dia se alejan más del logos. Sin darnos cuenta en occidente estamos alejándonos del logos, ese que sirvió para construir nuestra cultura. Nos estamos perdiendo en el mito poco a poco.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios