La tapia del manicomio

Propósitos 2017

Rafael Hernando ya nos ha dejado una hermosa y renovada promesa

Tenemos un nuevo propósito de Año Nuevo para añadir a los clásicos de toda la vida, que son, sin orden de nivel de preocupación: apuntarse a un gimnasio, aprender inglés (y alemán si uno ya tiene nivel medio de inglés), quitarse del tabaco y perder los kilos ganados en Navidad y media docena más (procedentes de las promesas incumplidas de años anteriores). El nuevo propósito que hemos apuntado este año en nuestra lista es no meternos con Mariano. (¿Con qué Mariano va a ser, lector desatento?). Como es obvio, esta promesa o propósito de 2017 también será incumplida, como todas las demás, pero en este caso sin remordimientos, seguramente. Porque buena cantidad de motivos nos dará para cabrearnos.

Para ver si aguantamos por lo menos un par de columnas sin criticar al Presidente, hemos optado por darle un repaso a su vicario en esta tierra, y así nos quitamos el mono. Nuestro ínclito y nunca bien ponderado Rafael Hernando ya nos ha dejado una hermosa y renovada promesa que también es evidente que va a incumplir: que el Gobierno cuya portavocía ostenta va a traer el AVE a Almería ya mismo. Ya mismo quiere decir ahora mismo voy, lo están peinando, no se puede poner porque está reunido…Porque, al igual que las demás promesas de primero de año de todos los mortales actuales y pasados -y seguro que también futuros- se sabe que se hacen para no cumplirlas. Como decía Antonio Machado: "Cuando dos gitanos hablan/ ya es la mentira inocente/ se mienten y no se engañan." Se ve que don Antonio no conocía a los portavoces, y por eso le echó el sambenito a los gitanos. Y si alguien cree que exageramos que mire las hemerotecas desde que Rato prometió que el AVE llegaría a Almería en 2005, para cuando los Juegos Mediterráneos, hasta nuestros días. Lo malo es que esta vez no será la última que nos prometen tan veloz transporte. Y no tenemos ni línea eléctrica para el Talgo, que sigue tardando lo mismo que cuando Alfonso XIII inauguró el trayecto en marzo de 1899. Cuatro días, como diría Hernando, y casi nada si lo comparamos con lo que tardará en llegar el AVE desde Murcia. O, si no hubiéramos prometido no meternos con Rajoy, diríamos que han pasado "muchísimos años", refiriéndose a los doce que lleva Trillo escurriendo el bulto con la catástrofe del Yak-42.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios