D OS semanas, a lo sumo tres, ha durado el "confinamiento" de nuestros políticos y su intento permanente de arrimar el ascua a su sardina. Cuando empieza a verse la luz al final del túnel ya encontramos los primeros encontronazos, las primeras diferencias, los primeros rotos en una crisis que "habíamos creído" que nos iba a hacer a todos mejores, más solidarios, más coherentes, con más criterio. Pero mucho me temo que nadie vamos a aprender prácticamente nada de este desastre que nos asola. A las primeras de cambio vuelve la lucha intestina, baldía y muchas veces cruel. Que les aproveche.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios