Hay una verdad rotunda: ¡en Almería somos así! Por proximidad, los murcianos: ¡no me veas qué almuerzos a las 9 de la mañana! Es una de las razones por las que me gusta ir a Murcia temprano. En Graná: lo único que se es que "son la polla", pero la mala follá no la he visto nunca. Misterios de la vida. Igual es que se me pegó y no la noto. En Almería, ¡ay en Almería! Está científicamente demostrado que el Levante nos afecta.

Entrando en el tema Almería: un amigo policía, ya fallecido, me contaba que en las guardias nocturnas con Levante, había más denuncias que las noches sin Levante. En las Jesuitinas, cuando teníamos clase a las 3 y media, yo tenía que dejar a los alumnos que "fogaran", los días de Levante.Y ahora lo reciente: el otro día en la fiesta del Almería, unos cohetes se prendieron en el techo del estadio, o algo así, y cuando llegaron los bomberos, las puertas estaban cerradas. ¿Acaso iban a estar abiertas? ¡qué ilusos los bomberos! El personal había cerrado al entrar el último y, por lo visto estaban viendo a Bisbal, que derecho tienen y nuestro cantante se lo merece.

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