La derecha pierde el norte

PP y C´s han iniciado una competición desesperada entre sí sin aportar propuestas ni cordura a la campaña

Tras la moción de censura y la llegada de un Gobierno socialista regenerador de la vida pública que ha devuelto la dignidad a las instituciones y ha puesto el país en marcha sacándolo de la parálisis en la que se encontraba por culpa del PP, descubrimos cómo la derecha -el PP y C´s- perdía completamente el norte. Ambos partidos iniciaban una competición a la desesperada entre sí en lugar de demostrar democráticamente a los ciudadanos sus propuestas y sus argumentos o por qué no aceptaban los resultados de la moción, una herramienta democrática y constitucional.

Pero la derecha sigue dando espectáculos. Como senador, soy testigo de cómo, principalmente el PP que es mayoritario en el Senado, ha basado su estrategia en arrollar a todos los grupos con su mayoría durante estos años, en no dialogar y en utilizar las cámaras como un trámite más en su despiadada escalada de recortes y medidas injustas. Ahora, tras la moción de censura a Mariano Rajoy han cambiado bruscamente la acción y la basan en el pataleo, el grito y en montar todo tipo de espectáculos bochornosos que denotan cómo han perdido el norte y cómo necesitan de bastante tiempo para recuperarlo. O, como algunos de los propios miembros del PP afirman, quizás les venga bien pasar un tiempo en la oposición ante tanta degeneración que están mostrando. PP y C´s ya comenzaron una despiadada carrera por ver quién es más de derechas y utilizan planteamientos absolutamente sectarios y radicales en sus argumentos. Además, convierten nuestra tierra en el escenario de su desesperación y pérdida total del norte, mostrando la peor de las políticas, la del pensamiento plano, la del insulto o la alarma social para obtener algún rédito electoral.

No hablan de educación, pero sí descalifican a estudiantes y profesorado. Tampoco hablan de sanidad, pero se dedican a denigrarla cuando está, objetivamente contrastado, que se trata de uno de los mejores sistemas sanitarios públicos de Europa. Hablan mal de Andalucía y siembran vientos con su actitud irresponsable y de falta de altura política y de proyecto en este momento en Andalucía y en España. Confío en que estos vientos se tornen en tempestades gracias al voto ciudadano, serio, responsable, de futuro y de esperanza de la ciudadanía sabedora de que la ofensa no es el arma para difundir las ideas; tan sólo las malas.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios