Ilusión por comenzar

Decían los Danza Invisible que “el fin del verano siempre es triste”. Y aunque algo de razón tenían, la realidad es que, en el fondo, todos deseamos la vuelta a esas rutinas que nos dan tranquilidad. Los concejales del PSOE llegamos con las pilas a tope para comenzar un nuevo curso político en el que hay mucha faena pendiente, y lo hacemos con el ánimo de aportar y de resolver los problemas que recogemos en todos los barrios de la ciudad, en la medida de la posible teniendo en cuenta nuestro lugar en la oposición.

Es curioso observar cómo el PP nos pide una oposición constructiva, mientras, con todo descaro, vota en contra de nuestras propuestas y en aquellas raras ocasiones en que las contamos con su apoyo, finalmente nunca llegan a ejecutarse. Deberían hacerlo porque todo lo que es beneficioso lo vamos a apoyar, aquellas iniciativas que sean buenas para la ciudadanía las vamos a reconocer.

El principal objetivo que desde el PSOE nos hemos marcado para este nuevo periodo político que comienza es escuchar y demostrar a los almerienses que hay otra manera de gobernar, fuera de los focos y de las grandes promesas. Porque, si hay algo que iguala a todos los vecinos y vecinas de Almería, es su sensatez a la hora de exigir al Ayuntamiento. Los almerienses no piden grandes inversiones, sino aquellas sencillas actuaciones que les harían la vida más fácil.

Arreglar una acera, instalar una señal de tráfico, pintar un paso de cebra, poner luz en los caminos, que el agua de lluvia no se encharque, que su barrio esté limpio, que los autobuses pasen con más frecuencia, son actuaciones que no dan grandes titulares pero sí mucho bienestar.

Que nuestra Feria vuelva a ser ese gran evento popular, con el que ponemos el broche al verano, reclamo para toda la provincia y para muchos visitantes, es otra de las grandes tareas que tiene el Ayuntamiento pendiente. Y ya vamos tarde para preparar la Feria del año que viene y conseguir que tenga la mayor presencia de colectivos almerienses.

Y esperamos con ilusión la finalización del soterramiento del AVE, que avanza imparable, ofreciendo una nueva imagen de la ciudad, que más pronto que tarde estará conectada al futuro a través del Corredor Mediterráneo.