D ESDE los estados martirizados del sur profundo de los Estados Unidos: Georgia, Luisiana, Mississippi, Alabama…habían llegado a Washington, aquel 28 de agosto de 1963, miles de hombres y mujeres negros acompañados por un buen número de blancos, para participar en la Marcha por los Derechos Civiles..

"Sueño que un día esta nación se levantará y vivirá el verdadero significado de su credo: afirmamos que estas verdades son evidentes, que todos los hombres son creados iguales" El tópico "I have a dream" la había repetido muy a menudo a sus asesores y en mítines, sin embargo, se ha sabido a los años que, aquel hombre que llevaba un mundo nuevo en su corazón, no tenía pensado decir el cliché revolucionario.

El director del Instituto de Investigación Martin Luther King, insistió que no estaba en el guión del discurso que había escrito la noche anterior: "King quería hablar sobre la importancia histórica de la lucha por la libertad de los afroamericanos, y tenía como modelo el discurso de Gettysburg, del presidente Lincoln", en noviembre de 1863, algo más de cien años antes, en homenaje a los caídos en la terrible batalla: "Que esta nación, Dios mediante, tendrá un nuevo nacimiento de libertad. Y que el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo no desaparecerá de la Tierra". El religioso olvidó su discurso escrito y volvió a hablar como un reverendo baptista, con fe, con esperanza, con caridad y con un convencimiento que enardeció a las masas. Negras y blancas.

Corría el año 1968, en el calendario 4 de abril, hace cincuenta y dos años, murió tiroteado en Memphis Martin Luther King. Fue asesinado mientras saludaba a la multitud enardecida desde el balcón donde se hospedaba, antes de acudir a un mitin de apoyo a la huelga de los empleados de limpieza mayoritariamente negros. El crimen fue cometido por un delincuente común que actuó por encargo, y provocó diez días de movilizaciones de la población negra y disturbios que provocaron 43 muertos.

King que participó como activista en protestas contra la Guerra del Vietnan, en actividades por terminar la segregación estadounidense y la discriminación racial, fue condecorado con el Premio Nobel de la Paz en 1964, cuatro años antes de su muerte. Está considerado como uno de los magnicidios del s.XX y el Día de Martin Luther King, desde 1986, es jornada festiva en los Estados Unidos.