La prueba más evidente de que el presidente de la Junta no se cree lo de la pinza PSOE-Vox es el propio presidente de la Junta. Repasen su famosa frase en Fitur, sílaba a sílaba: "Hay un bloqueo sistemático y permanente por parte de ambas fuerzas políticas, lo que se ha denominado la pinza política PP y Vox". Sí, sí, "PP y Vox", esa es la pinza según las palabras literales de Moreno Bonilla. Quiso decir PSOE y Vox, pero le salió un acto fallido que iguala a los mejores de Chaves. Estaría pensando en una futura cohabitación con Macarena Olona a la que teme como a una vara verde y a la que saludó en Fitur con un "te veo muy roja" [por el traje que ella llevaba] a lo que la desinhibida diputada por Granada le contestó "y yo a ti muy pálido". La pinza de plastilina, como la llama mi colega Juanma Marqués, traiciona el subconsciente de Moreno.

Quizá para corregir el desliz, al día siguiente hubo en Canal Sur una entrevista de cuello alto y guante blanco en la que el portavoz del Gobierno andaluz acusó a PSOE, Podemos y Vox de formar ¡un partido único!, ¡un tres en uno!, ¡una pinza para desestabilizar Andalucía! La colección de plagios que ha hecho el gobierno del PP de las viejas prácticas y lemas del PSOE está tocando máximos en estas vísperas electorales. Además de la okupación de la RTVA, latiguillos como "lo que es bueno para Andalucía es bueno para España", una pinza como la de PP e IU en los 90, Andalucía en marcha [imparable, antes], el Gobierno central nos roba con la PAC… y ahora la amenaza para la estabilidad como excusa para adelantar elecciones.

Estamos ante el segundo aviso del presidente de que su partido convocará las autonómicas. Lo dice en Madrid, en estéreo con la central del PP en la calle Génova, y en una feria de turismo, en vez de donde debe, que es en el Parlamento andaluz. El final de la legislatura andaluza será una disolución de diseño como la de Castilla León y por los mismos motivos: para consolidar el poder cuando más le convenga a su organización. La entrega incondicional de Rivera al Partido Popular en todas las autonomías donde daban los números ha sido un suicidio. Y una incoherencia: si en Andalucía votaron por la alternancia después de casi cuatro décadas de dominio socialista, con casos de abusos, irregularidades y corrupción, debieron hacer lo mismo en Madrid y Castilla León. Pero allí, en vez de renovación hubo sumisión. En ambos casos, como en Andalucía y Murcia, se ha ratificado que cuando un partido llega al poder en una región lo hace para quedarse varias legislaturas.

En Andalucía el PP no se ha merendado todavía a Cs. Quiere evitar como socio a Vox, que en las elecciones de noviembre de 2019 aventajó a los populares en Sevilla, Cádiz, Almería y Huelva. El objetivo aparente de Moreno es repetir coalición. Para lograrlo, la especie en peligro de extinción más protegida por la Junta ha dejado de ser el lince ibérico. Ahora es Ciudadanos.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios