Procesan a Manuel Recio

Del presunto procesamiento del que fuera alto cargo de la Junta, Manuel Recio, se viene hablando desde el año 2011. Largo tiempo el pasado, y con la migraña de que en cualquier momento se podría hacer realidad la noticia, como ha ocurrido en estos días. A lo largo de estos años, desde los lejanos tiempos de la jueza Alaya en Sevilla, el nombre del almeriense Recio aparecía una mañana en la sección de justicia de los medios, sobre la investigación que se estaba llevando a cabo, volviendo a desaparecer del interés informativo días después ante la falta de continuidad. Vivir así, sin un archivo definitivo de la causa durante casi tres lustros, ha debido ser para la familia Recio una lucha sin final, una migraña sin aspirina, un dolor sin anestesia. La justicia debe tener razón, y el que la hace la debe pagar, pero cuando pasan los años como ha ocurrido con esta cuestión de las subvenciones a Delphi de más de treinta millones de euros, no se sabe hasta donde podemos decir que se está haciendo justicia.

Es de suponer que a Recio lo salvará el Tribunal Constitucional con Conde Pumpido a la cabeza, para eso lo puso Pedro Sánchez al frente del mismo, como ha hecho con otros compañeros de los Eres, pero estos años pasados llenos de zozobra y angustia, esperando cada mañana la confirmación recibida en estos días, minan la tranquilidad y la felicidad de cualquier familia, también la de Recio. Y esta situación no es justificable.

No estoy defendiendo lo hecho por don Manuel Recio con los más de treinta millones dados a una empresa, si hizo algo mal lo debió pagar en su momento, con lo que no se puede estar de acuerdo es que se tarden quince años en investigar unas subvenciones, o que unos jueces, por interés político, escondan en unos cajones unos informes que debieran estar juzgados, o a la espera de que prescriban, cuestión esta que se han dado en muchas de las acciones judiciales en las que se han visto implicados políticos socialistas de la Junta. A los políticos les suele llegar su San Martín, aunque los jefes por regla general buscan soluciones, y a la vista tenemos al Pumpido de marras, pero, y de los jueces, ¿qué me dicen ustedes? Estos pueden alargar los casos años, lustros, décadas, hasta que les llegue la prescripción. Se archivan y como si nada hubiera pasado. No es buena la manipulación que los políticos intentan hacer de la justicia, pero de la de los jueces casi nadie habla. Y en el caso de Manuel Recio alguien ha estado jugando con el expediente y los plazos durante tres lustros.