En El Diario de Almería del 10 de Enero del 2012 publiqué mi “Mucho Socialismo por hacer” Ayer Lunes 29 de Abril los Socialistas de Almería, en un ejercicio de absoluta democracia, digna de ser imitada por los partidos donde los cargos se designan a dedo, han elegido una nueva comisión ejecutiva.

No conocía a ninguno de los cuatro candidatos, los juzgué por sus discursos.

Desde Descartes a Albert Camus, el pensamiento Francés, al que tanto debemos los demócratas del mundo, ha determinado mi equilibrio intelectual. Debo a ellos mi amor a la palabra, al razonamiento, a la conciencia social.

Desde esta base sólida me incliné por la lista encabezada por Fernando Martínez López. Todo a lo largo de su discurso planeaba la sensatez, la disciplina intelectual. Razonaba como un hombre de estado, estaba, con inteligencia, por encima de “la melée”. Fue provocado, pero tuvo la sensatez y la elegancia de no recoger el guante.

Comprende Fernando que si los Socialista quieren recuperar la estima de los que nos han abandonado, hay que “Democratizar” las estructuras del partido, hay que abrirlo a la influencia democrática no solo de los militantes sino también de los simpatizantes que nos votan. Tuve la sensación narcisista, el “feeling”, de que Fernando y yo estábamos en la misma largura de onda.

El Socialismo no es solo un credo político, es sobre todo un ”Credo Social”, una filosofía, una manera de entender La Vida. Una sociedad Libre, Democrática, Socialista no se puede concebir y no se puede conseguir sin una Enseñanza Laica, sin una Ley de Separación de Las Iglesias y del Estado, sin un nuevo Concordato, sin una Ley Electoral que sea Democrática y Decente que permita a los diputados votar según su conciencia y no según las instrucciones de las directivas de los partidos.

Cuando un parlamento es realmente democrático no se puede gobernar por decreto.Necesitamos una Ley Electoral que garantice la independencia de los diputados y permita a los electores saber quién es el diputado que los representa.

La monstruosidad democrática de gobernar por decreto solo puede darse cuando se asume que todos los diputados son dóciles como un perrito chiguagua. En contra de una ley propuesta por Tony Blair 122 diputados de su partido votaron en contra, el proyecto de ley fue aprobado porque diputados de la oposición votaron a favor. Inglaterra, la madre de la democracia moderna, es, también,la mejor democracia vigente.