La necesidad de la otan en la actualidad

Recientemente se ha celebrado la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los países miembro de la OTAN donde se han tomado decisiones para definir el futuro de la alianza en la presente década y se han puesto de manifiesto el compromiso firme de Estados Unidos con la OTAN y la firmeza de la relación entre Europa y América del Norte. La OTAN es una alianza de 30 países, 28 europeos más Estados Unidos y Canadá, con una dimensión política y otra militar cuya finalidad es garantizar la libertad y la seguridad de los estados miembro por medios políticos y militares, promover los valores democráticos, preservar la paz, prevenir conflictos utilizando una fuerza militar disuasoria y luchar contra las amenazas globales.

El Tratado fundacional se firmó en 1949 y es una organización que en otros tiempos suscitó gran interés y en algunos momentos también gran controversia. Las secuelas de dos guerras mundiales, la sombra de la guerra fría y la amenaza de una guerra nuclear que flotaba en el ambiente propició la creación de una alianza con el fin de superar los fantasmas de una nueva guerra mundial y servir como elemento de defensa común basado en su famoso artículo 5, que hace referencia al compromiso de defensa colectiva: la agresión a un país se considera una agresión a todos. En esta cumbre se han analizado las amenazas actuales, destacándose el terrorismo en todas sus formas, los ciberataques, la desinformación, el uso de tecnologías disruptivas, la proliferación de armamentos de destrucción de masas y la erosión de los sistemas de control de armas.

En las conclusiones también se menciona que la relación con Rusia está en el nivel más bajo desde la guerra fría y su agresividad en muchas de sus acciones es vista como una amenaza para la seguridad de la alianza y se hace referencia al deseo de colaborar con China en el control de armamentos y en la lucha contra el cambio climático, pero su influencia creciente en el mundo y su política internacional son vistas como un desafío para la seguridad. La OTAN es la alianza más potente y con mayor éxito de la historia y a la vez que se producen cambios en el mundo se está adaptando a ellos y sus misiones se han ido actualizando con el paso del tiempo. Uno de sus lemas es que una OTAN fuerte es buena para Europa y para América del Norte y garantiza el futuro, la libertad y la alianza de los países miembro.

En la agenda de la OTAN para 2030 se apuesta por una defensa fuerte y una disposición a dialogar con todos los países, pero también se quiere asegurar que se pueden afrontar los desafíos y las amenazas presentes y futuras reforzando la capacidad de defensa y de disuasión y ampliando la colaboración con países de otras zonas del mundo.

Si echamos la vista atrás, se debe reconocer que la OTAN ha proporcionado seguridad y estabilidad durante más de 70 años y ha ayudado a pacificar zonas o a solucionar conflictos que de otra forma habrían causado daños mucho mayores. También ha sido un foro de defensa común que ha servido para unificar doctrinas de actuación y modernizar las estructuras militares de los países miembros, incluido el nuestro.

Se podrá decir que Europa no tiene riesgos en la actualidad como los que generaron las dos guerras mundiales del siglo pasado, pero una razón es precisamente la existencia de esta alianza y su capacidad de disuasión. Debemos pensar que Rusia ha continuado sus acciones agresivas, siguen los ataques del terrorismo islamista, China ha hecho crecer su fuerza militar y que sigue habiendo conflictos en muchas partes del mundo cuya evolución y consecuencias son imprevisibles.

Hoy en día algunos sectores de las sociedades de los países occidentales cuestionan muchas de las decisiones, alianzas o pactos que se hicieron en un pasado no muy lejano y que nos han traído hasta donde estamos ahora, después de unos periodos de paz y estabilidad muy largos. Pero las amenazas a la seguridad rebasan las fronteras y, lo mismo que ocurre en el ámbito económico, es mejor hacer frente a todos los retos actuales y futuros unidos que hacerlo cada uno por separado y la OTAN, en sus dimensiones política y militar, hasta ahora ha supuesto una garantía de seguridad y estabilidad, aunque muchas veces no seamos conscientes de ello.