Macael cerró 2018 con un padrón de 5.539 vecinos entre 2.853 hombres y 2.696 mujeres. Su número de censados con edades superiores a 65 años es de 986 (17,80%), mientras que 1.069 de sus vecinos tienen entre 0 y 20 años, lo que supone el 19.30%.

Los más jóvenes de este grupo de adolescentes fue el colectivo poblacional que aglutinó todo el protagonista de las fiestas patronales en honor a Nuestra Señora del Rosario que agotó su programación anteayer, aunque consumió en la jornada de ayer sus últimas horas de fiesta y diversión.

La agenda, de hecho, conoció su doble versión matinal y vespertina. Así, la apertura de la feria del mediodía se produjo a las 13:30 horas, ubicada en la calle García Lorca. El relevo lo tomó la feria inclusiva del niño en las atracciones feriales sin ruido, desde las 19:00 horas, dispuestas en la Avenida Paco Cosentino.

Macael se ha unido a otros municipios que han decidido reforzar su apuesta por la inclusión a través de su feria. La localidad sienta, de esta forma, las bases para que las personas con autismo o problemas sensoriales puedan disfrutar de las atracciones sin las habituales molestias que ocasiona el ruido. El recinto de las atracciones permaneció en silencio desde la apertura hasta su cierre, en la jornada de ayer.

Algunas localidades, también almerienses, se han puesto las pilas en esta materia y han reservado una serie de horas de sus respectivos programas festivos para aplicar una feria sin ruidos y han llegado a rebajar los decibelios a la mitad para favorecer el descanso de las familias.

La presente edición concluye, de esta forma, con el recuerdo a cinco días de fiestas y un montón de momentos para el recuerdo. Es el caso de la lectura del pregón a cargo de Martín Martínez “el de los polos”; las actuaciones de Dvicio, Los Brincos y Dalai con su tributo a Mecano; la procesión de la Patrona de anteayer o el estreno de uniforme de los componentes de la Banda de la Asociación Cultural Musical de Macael, entre otros.