La comarca del Levante Almeriense ha mostrado en Fitur la amplia variedad turística que ofrecen sus catorce municipios, haciendo un recorrido desde las espectaculares playas de Carboneras o San Juan de los Terreros hasta las minas de Bédar, la Geoda de Pulpí o la excelsa gastronomía de Turre.

Y es que, como ha destacado la presidenta de la Mancomunidad, María López Cervantes, "llevamos años apostando por la calidad para ofrecerla a todos los visitantes". Ha señalado que el Levante "tiene una multitud de oferta que se puede disfrutar en la costa con playas salvajes y otras con todos los servicios, incluso adaptados para personas con dificultad de movilidad, desde Carboneras, Mojácar, Garrucha, Vera, Cuevas del Almanzora y Pulpí. Y también se encuentra  la esencia del turismo de interior pasando por Turre, Bédar, Los Gallardos, Sorbas, Lubrín, Antas, Taberno y Huércal-Overa. Es el complemento perfecto para disfrutar de sol, playa, interior y la mejor gastronomía, con unos productos de la máxima calidad".

La alcaldesa de Garrucha, acompañada por el alcalde de Pulpí, Juan Pedro García, la vicepresidenta de la Diputación Provincial, Ángeles Martínez, la edil de Turismo de Garrucha, Rocío Galindo, y el concejal de la Geoda, Juan Bautista López, ha presentado un vídeo de cinco minutos (el que encabeza esta información) que recorre los catorce municipios.

Playa, montaña, tradiciones y gastronomía

El vídeo promocional de la Mancomunidad del Levante Almeriense comienza su recorrido en Taberno, mostrando su carácter rural, donde niños y mayores pueden entrar en contacto con la naturaleza y los animales. También se hace referencia a los rallies que tanta popularidad tienen en el municipio.

De Antas se destacan sus campeonatos de coches teledirigidos, sus yacimientos argáricos, referentes de la Prehistoria en Europa y su acueducto, símbolo de la localidad.

El Lubrín el viaje se detiene en la tranquilidad y relax que domina sus calles. El lavadero municipal, sus olivares con los que se produce uno de los mejores aceites de Andalucía, su gastronomía y sus lácteos de leche de cabra son los protagonistas.

De Carboneras se muestra su carácter litoral, con la Isla de San Andrés y sus bellísimas playas por las que se puede caminar o pasear a caballo, bajo su eterno sol.

Los Gallardos, pueblo de interior a escasos minutos de la costa, muestra su antigua industria artesanal, su naturaleza, parques y calles tranquilas, su nuevo Espacio Cultural y la bella ermita de Alfaix.

En Turre, pueblo vecino del anterior, destaca su fuente morisca, su iglesia, única en la que las vidrieras relatan el embarazo de la Virgen María, o su exquisita gastronomía, donde los caracoles en salsa y las morcillas son plato imprescindible.

De Vera el vídeo promocional destaca su cultura taurina, pues en la localidad se encuentra la plaza de toros más antigua de la provincia. También su patrimonio histórico es protagonista, con el cerro del Espíritu Santo, antiguo asentamiento medieval destruido por un terremoto.

Mojácar, uno de los pueblos blancos de la comarca levantina, enseña al mundo su artesanía y sus calles estrechas, llenas de flores y con bellísimas plazas donde el tiempo parece detenerse.

En Cuevas del Almanzora el viajero tiene la oportunidad de visitar numerosos museos, deleitarse con su arquitectura palaciega testigo de la riqueza de sus minas, o caminar por un pueblo pesquero y turístico como Villaricos. 

Volviendo al interior se halla Sorbas, reconocido municipio alfarero y destino imprescindible para los amantes de la montaña, con sus cuevas de yesos.

De Pulpí, como no podía ser de otra manera, se hace especial mención a la Geoda Gigante, que este verano abrió sus puertas al mundo llamando la atención a nivel internacional. Por supuesto, tampoco faltan las playas de San Juan de los Terreros, tan espectaculares como la de Los Cocedores.

En Bédar, el viaje se detiene en sus aguas, su tranquilidad y en los secretos que esconde bajo la tierra, con unas minas de enorme espectacularidad.

Garrucha, pueblo nacido del mar, enseña sus playas, lugar de descanso veraniego de miles de personas, y su gastronomía ligada a la actividad pesquera, en la que destaca su archiconocida gamba roja.

El viaje termina en Huércal-Overa, capital administrativa de la comarca y que cuenta con un gran patrimonio histórico y cultural.