El entorno de la Geoda de Pulpí ya puede verse desde bien lejos. Tanto las instalaciones como el entorno en el que se encuentra la Mina Rica, ubicada en la pedanía pulpileña de Pilar de Jaravía, ya cuenta con un sistema de iluminación que resalta la belleza de este espacio minero y geológico, también de noche.

El Ayuntamiento de Pulpí ha instalado la luminaria, compuesta por 30 focos de luz LED cálida que realzan los edificios mineros ubicados en los exteriores de la Mina “Quién tal pensara”.

Los hornos de calcinación, el Cortijo de Orozco, la sala de máquinas, el transformador, el Castillete y la chimenea de aireación han sido los escenarios principales que han sido iluminados. Así, ahora también se unen al centro de recepción de visitantes y a la vía que comunican los exteriores con la entrada a la mina, que ya contaban con luz.

El alcalde de Pulpí, Juan Pedro García, el concejal de la Geoda, Juan Bautista López, la coordinadora de visitas, Milagros Carretero, y el técnico de iluminación han visitado las instalaciones para corroborar “la belleza de este espacio minero del siglo XIX que ahora también podrá disfrutarse de noche”.

Visitas nocturnas en invierno

Además, también han destacado que próximamente, con el horario de invierno, comenzarán las visitas guiadas nocturnas, donde los turistas podrán obtener una perspectiva distinta del recorrido por el entorno de la Mina Rica y Geoda de Pulpí. Un horario de invierno que comenzará el 27 de octubre.

En la actualidad están agotadas todas las entradas a la geoda hasta el 18 de noviembre. A partir de esa fecha es posible reservar plazas, excepto los fines de semana (sábados y domingos), que en la actualidad están también agotados en su totalidad hasta el 19 de enero, última fecha en la que la web ofrece la compra de tiques.

Cabe recordar que el precio de la visita a la Mina Rica y la geoda gigante es de 22 euros para los adultos, 10 euros residentes en Pulpí y menores de 8 a 16 años, 5 euros para los menores residentes en Pulpí y 15 euros para jubilados, familia numerosa, discapacitados y miembros de grupos de 15 personas. La duración de la visita es de aproximadamente de 90 minutos.

La geoda de Pulpí es la segunda más grande del mundo y la mayor que se puede visitar. Abrió al público a finales de julio de este mismo año y ya la han visitado miles de personas llegadas de todo el mundo, convirtiéndose en un gran atractivo turístico.