El delegado de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Rául Enríquez, respondió ayer a la queja pública manifestada este martes por el alcalde ejidense y vecinos de Balerma sobre el estado de la Rambla del Sentir. Enríquez le pide al Ayuntamiento de El Ejido que "acometa la limpieza y adecuación de los tramos urbanos de las ramblas que atraviesan el municipio en cumplimiento de lo dictado por el Tribunal Supremo en la sentencia 1962/2017, de 13 de diciembre, de la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso Administrativo". Francisco Góngora con anterioridad había señalado que la única competencia municipal es "recoger enseres o residuos que hubiera en el tramo urbano, y a la vista está que no los hay".

Según la Junta el Ayuntamiento "conoce desde el pasado septiembre que la Junta va a ejecutar los trabajos de limpieza y acondicionamiento en los tramos de competencia autonómica de la rambla del Sentir, una vez que se adapte el proyecto para actuar en los cauces de la provincia a la nueva Ley de Contratos del Sector Público, aprobada por el Gobierno central a finales de 2017". Así, afirman "se le comunicó en un escrito dirigido al Área de Agricultura y Medio Ambiente".

Ante las quejas del alcalde y del presidente de la Junta Local de Balerma, Antonio Gómez, sobre el estado de la Rambla del Sentir y las consecuencias por una posible riada, el delegado de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio contraatacó ayer al advertir sobre "la iniciativa del Ayuntamiento ejidense recogida en el proyecto 'Obras de urbanización de la unidad Ampur-6-BA en Balerma', que pretende evacuar las aguas pluviales hasta la rambla del Sentir o del Loco". Según el delegado, "agravando con ello el problema que se puede presentar en Balerma justo cuando el cauce esté cumpliendo con su función natural de evacuación del agua de lluvia y aporte de sedimentos al mar para evitar que la playa siga teniendo los problemas de regresión".