Un enfermero de Turre sufre una agresión de un paciente cuando salía de trabajar del consultorio

Sucesos

El agresor, que había sido evacuado antes por la Guardia Civil, estaba esperando al enfermero en la puerta del consultorio

El Sindicato de Enfermería SATSE pide que se endurezcan las penas por agresiones a sanitarios

El SAS toma medidas para evitar las agresiones a sanitarios, que han aumentado un 7% hasta junio

Consultorio médico de Turre.
Consultorio médico de Turre. / Google Maps

El Sindicato de Enfermería (SATSE) de Almería ha denunciado la agresión sufrida el pasado martes 10 de septiembre por un profesional de Enfermería en el consultorio de atención primaria de Turre, durante el desarrollo de su labor asistencial.

La agresión tuvo lugar sobre las 11 de la mañana del citado día cuando un enfermero acudió a la consulta de la médico tras oír gritos de un paciente (que había acudido fuera de su hora de cita) exigiendo a la doctora un informe que lo incapacitase para el trabajo. A pesar de que se le tomaron las constantes vitales, tensión arterial, etcétera, el paciente no paró de proferir insultos y amenazas de agresión física tanto a la médico como al enfermero, por lo que estos avisaron a la Guardia Civil, que se personó en el consultario y en un primer momento lograron tranquilizar al usuario.

Una vez que se hubo marchado la Guardia Civil, el usuario volvió a entrar en el consultorio para continuar increpando a los profesionales sanitarios. La situación más peligrosa sucedió más tarde, cuando el enfermero se disponía a salir del centro tras acabar su jornada laboral. En la puerta del consultorio se encontraba este usuario con intención de agredir al enfermo, pero gracias a la rápida actuación de otro compañero enfermero y de un policía local que allí se encontraban pudieron detener la agresión física que pretendía llevar a cabo este individuo. No obstante continuó con los insultos y amenazas.

Ante esta nueva agresión a un profesional de enfermería, SATSE ha vuelto a pedir tanto a la Consería de Salud como a la justicia que se tomen todas las medidas necesarias para acabar con la lacra de las agresiones al personal del Servicio Andaluz de Salud y en especial de la enfermería. Según señala el sindicato, aunque la violencia en los centros sanitarios responde a un fenómeno que afecta a todos los órdenes sociales, la enfermería es una profesión cercana a los pacientes y ese es uno de los mayores riesgos a los que están expuestos, ya que suelen ser los primeros en recibir las iras de usuarios descontentos con el sistema.

Asimismo, el Sindicato de Enfermería ha recordado que hace tiempo que viene demandando un endurecimiento de las penas a los agresores y, en especial, que se califiquen como delito de atentado las agresiones al personal sanitario. En este sentido, SATSE ha valorado positivamente que la justicia andaluza haya comenzado a aplicar este criterio en recientes dictámenes judiciales ya que, a su juicio, disuadirá a los usuarios de descargar su furia por los fallos del sistema sobre los profesionales ante los posibles riesgos penales.

Incremento de agresiones

El Sindicato de Enfermería recuerda que las agresiones a profesionales del SAS son un fenómeno creciente en los últimos años. Según los datos oficiales aportados por Registro Informático de Agresiones de Centros (RIAC), durante el año 2023 se registraron 1.564 ataques carácter físico y verbal, casi un 11 por ciento más que en 2022. De las agresiones del año 2023, último registro oficial, en toda Andalucía 287 han sido agresiones físicas y 1.277 no físicas, creciendo en 28 y 42 casos respectivamente frente a los datos de 2022.

En concreto en la provincia de Almería se contabilizaron 92 agresiones (16 físicas y 76 no físicas) en el año 2023. Finalmente, el Sindicato de Enfermería recuerda que la violencia en los centros sanitarios y las agresiones a profesionales lejos de ser hechos puntuales se han convertido lamentablemente en una constante. Por eso, el Sindicato de Enfermería recomienda a los profesionales sanitarios que denuncien cualquier tipo de agresión física o verbal, ya que es el mejor instrumento del que dispone el Estado de Derecho para detener cualquier tipo de abuso.

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