El Museo de Arte ‘Doña Pakyta’ se sumó a la renovación de secciones temporales que en los últimos días está realizando el Área de Promoción de la Ciudad del Ayuntamiento de Almería en la red museística municipal con una nueva obra invitada. Se trata de ‘Pueblerinos’, un óleo sobre lienzo del pintor almeriense de Huércal-Overa, Jesús de Haro, fechada en 1973, perteneciente a la primera etapa del pintor, actualmente profesor titular de Bellas Artes en la Universidad de Granada.

La obra pertenece a la colección de la familia Artero Núñez y podrá visitarse en la pinacoteca en esta sección producida por la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino, que organiza junto al Ayuntamiento y en colaboración con Diputación hasta el próximo 25 de julio.

El concejal de Promoción de la Ciudad, Carlos Sánchez, destacó que en esta ocasión sea un autor almeriense y coetáneo, todavía en activo, el protagonista de esta sección temporal para el mes de julio. “Es una obra con una familia del ámbito rural, que de manera gratificante tanto por parte del Museo como parte del Ayuntamiento vamos a poder disfrutar hasta el 25 de julio. Jesús de Haro ha pasado por distintos estilos y en esta obra en concreto nos recuerda un poco al movimiento Indaliano, en cierto modo, y espero que sea muy visitada por los almerienses y turistas que nos visiten estas semanas”.

Por su parte, el director del Museo de Arte, Juan Manuel Martín, detalló que “es una obra de su primera etapa, en la que todavía está buscando su forma de expresión definitiva. La obra entronca con lo que es el espíritu en los años 70, cuando se recupera la figuración y se pone en valor ciertos temas, como el mundo rural, la familia… Partiendo de la figuración va a tener una cierta vinculación con el expresionismo, de ahí los colores terrosos que son protagonistas en el cuadro, las expresiones tristes y perdidas de algunos personajes, sobre todo los adultos, mientras que los niños representan esa mirada al futuro, esperanzada, un poco ajenos a la tristeza de sus progenitores”.

El también director de la Fundación de Arte ha añadido que “Jesús de Haro es un buen representante de lo que era la pintura española en los años 70, en los que vamos a ver la influencia del movimiento Indaliano y especialmente Perceval, y también la tradición del 98 español, esa tradición con Zuloaga, que nos hace pensar en cómo el español, el paisano, el que vive en el mundo rural, tiene también un protagonismo especial en la pintura, al trasladarlo en su hábitat. Por otro lado, la forma de representar el paisaje es muy almeriense, un paisaje árido, terroso, en el que la familia parece que se presenta como parte del paisaje, como una formación montañosa en primer plano”, concluyó.