En la mañana del pasado día 12 de agosto, tenía lugar la primera visita oficial del recién nombrado General Jefe de la Brigada de la Legión 'Rey Alfonso XIII' II de La Legión, Melchor Jesús Marín Elvira, a la Pontificia, Real, Venerable e Ilustre Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad y Santo Sepulcro del Redentor (Paso Negro), en cuya casa de hermandad fue recibido por la recientemente elegida Presidente-Hermana Mayor, Blanca López Gómez, acompañada por el consiliario y párroco de la ciudad, Víctor Manuel Fernández Maldonado, así como por un nutrido grupo de cofrades, pertenecientes a la nueva Junta Directiva, tal y como se extrae del comunicado que desde la propia Área de Comunicación del Paso Negro se ha emitido tanto través de la Página Web (www.pasonegro.org) en primera instancia, como desde las cuentas oficiales en las diferentes RRSS en las que tiene presencia (Facebook, Twitter e Instagram).

En esta visita tuvo oportunidad de admirar una pequeña muestra del rico y extenso patrimonio con el que cuenta la hermandad decana provincial, exponiendo para la ocasión, el trono del Santo Sepulcro del Redentor y el paso de misterio de la Oración en el Huerto, con todas sus imágenes entronizadas para tan importante cita y ante tan relevante presencia, además de alguno de nuestros particulares penitentes exquisitamente bordados en oro sobre terciopelo. Tras recibir los saludos, presentaciones y explicaciones por parte de representantes de la cofradía, tuvo también oportunidad de dejar testimonio de su grata presencia,  estampando su rúbrica junto con una afectuosa dedicatoria, en el libro de honor del Paso dispuesto para la ocasión, en la que sería una primera toma de contacto con los nuevos dirigentes negros.

Finalmente, se le hacía al General entrega, por parte de la Hermana Mayor, de un cuadro que contenía el escudo de la muy titulada cofradía, bordado en oro y sedas sobre terciopelo negro, haciendo a su vez entrega el General Jefe, en nombre de la Brileg, de una publicación especial realizada con motivo del centenario de la Legión (1920-2020).

Melchor Marín, que sustituye en el cargo al general Marcos Llago, es natural de Lorca (Murcia) cuenta con una edad de 55 años, y a lo largo de su carrera ha mandado diversas unidades legionarias, paracaidistas, la brigada Galicia VII, además de otros destinos de Infantería. Ha estado también estado destinado en los mandos de Doctrina, Apoyo Logístico y Operativo al igual que en el Cuartel General de Alta Disponibilidad entre otros, ascendiendo a General de Brigada en octubre de 2019,  para ser nombrado Jefe de la Brigada 'Rey Alfonso XIII' II de la Legión, el pasado 14 de abril del actual año. Diplomado de Estado Mayor, está en posesión de cursos nacionales tales como observador de Misiones de Paz o Mando de Unidades Paracaidistas entre otros. A lo largo de su carrera militar estuvo vinculado en varias etapas a la Legión, en concreto ocupó el cargo de Capitán de la Defensa y de Coronel al frente del Tercio Gran Capitán en Melilla.

Con esta visita protocolaria del nuevo General Jefe de la Brileg, que además coincide en el tiempo con la nueva elección de Presidente-Hermana Mayor del Paso Negro, ratifica su compromiso de mantener y reforzar los ya de por si extraordinarios vínculos con las ciudades y cofradías en las que la Legión tienen presencia en sus actos religiosos, como acontece en esta situación con la cofradía huercalense de Viernes Santo.

Cabe recordar que precisamente al Grupo de Artillería de la Campaña II de la Legión Española Rey Alfonso XIII, le fue concedida la Mayordomía de Honor del Paso Negro, título que se otorga en contadas ocasiones, tan solo a aquellas personas, o instituciones acreedoras de recibirlo, por su muy destacada colaboración, trabajo y esfuerzo en beneficio o engrandecimiento del Paso Negro.

Otro muestra reseñable de tan especial relación, bien podría ser el hecho de que en 2014 y encuadrado dentro de los actos del 350º Aniversario de la fundación del Paso Negro, se rendía homenaje a tan valiosa Unidad Militar, como símbolo duradero de la unión con la Semana Santa de la Villa Huercalense, inaugurándose un monolito en su honor en la plaza que desde aquel entonces, lleva el nombre de Plaza de la Legión Española, que está situada frente a la casa de hermandad.

El general recibió un cuadro con el escudo de la cofradía.

De igual modo diversos miembros del Paso Negro, han recibido el nombramiento y distinción como Artilleros de Honor. El Paso Negro participa y acompaña a La Legión durante sus días más señalados, como puede ser cada 20 de septiembre con motivo de la celebración de la fundación de La Legión, en la celebración de la conmemoración de la batalla de Edchera, la festividad del 2 de mayo o el día de Santa Bárbara, patrona de Artillería, fechas  muy señaladas y donde Huércal-Overa, representada por su cofradía más antigua, está presente, contribuyendo además el paso de forma benéfica con becas de estudio para los caballeros o damas legionarias merecedores de la misma, y de las que se hace entrega durante las mencionada festividad, atendiendo la noble invitación que se cursa cada año.

Además el Paso Negro es asiduo participante de los encuentros nacionales de Hermandades Cristianas y Legionarias, donde las cincuenta y cuatro hermandades representadas, comparten con La Legión, unas extraordinarias jornadas.

La llegada de la Legión a Huércal-Overa el Viernes Santo supone un momento único como es el de presenciar a la banda de guerra y escuadra de gastadores, y la sección de honores, en el entorno de las glorietas, durante la tradicional presentación de bandas, es una cita ineludible y una antesala espectacular que aguarda solo unas horas después, durante el cortejo procesional del Santo Entierro de Cristo.

El fervor por los militares es denominador común en gran parte de los hijos de esta villa, y este se acentúa cuando se trata de la presencia de la Legión Española cuya popularidad manifiesta, atrae, por si sola, a cuantiosos visitantes deseosos de tan brillante y emotivo espectáculo, conocedores de la sin igual puesta en escena de este cuerpo castrense así como la marcialidad que acompaña a los mismos.

Desde 1992, la Legión que tiene a la muerte como seña y signo, escolta y acompaña musicalmente al paso del Santo Sepulcro del Redentor, obra maestra de estilo gótico del insigne tallista Guzmán Bejarano, paso o trono que ya algunos acostumbran a llamar "La Catedral Andante" durante cada Viernes Santo, en la que es una de las fechas mas representativas que conmemora el cristianismo. El culmen de la procesión se produce durante las paradas o estaciones que realiza el Santo Entierro, produciéndose a su paso un silencio fervoroso en señal de respeto durante el solemne cortejo, que es roto en el momentos que, el sacerdote que preside el acto, inciensa la imagen de Cristo Yacente, por el repique de tambores y sonar de trompetas de la Banda de La Legión, en el emotivo toque de oración, ante la emoción contenida de los presentes.