Un total de 22.500 personas ha estampado su firma en la plataforma change.org y ha mostrado su oposición a la construcción de un área comercial y residencial en los accesos a las playas de Genoveses, Mónsul y Cala Carbón, zona protegida del Parque Natural de Cabo de Gata-Nijar.

Este proyecto, que ha sido remitido a la Junta de Andalucía para su evaluación ambiental, cuenta con el rechazo frontal de colectivos conservacionistas y de ciudadanía. En una iniciativa a través de change.org, se ha iniciado una recogida de firmas para evitar el desarrollo urbanístico de este espacio protegido.

“Si no se consigue paralizar, se construirán varias zonas residenciales y un área comercial, en total más de 2000 m2, en uno de los pocos espacios sin urbanizar que quedan en el pueblo, próximo a las ya sobre explotadas playas de Genoveses y Mónsul”, explican los detractores.

Añaden que la implantación de una zona residencial y comercial “no solo tendría unos efectos ambientales negativos por el incremento de tráfico rodado y la contaminación lumínica si no que, además, supondría un desequilibrio para el tejido económico local del municipio de San José, que ya cuenta con numerosas áreas comerciales que dan respuesta a las necesidades de sus habitantes y visitantes”. Este proyecto contradice, según los firmantes, las normativas reguladoras del Parque Natural y atiende sólo a intereses económicos de las empresas constructoras, según reflejan en su escrito.

El Ayuntamiento de Níjar ha retomado la tramitación del proyecto y lo ha remitido a la Junta de Andalucía, que ha iniciado la evaluación ambiental de la innovación al planeamiento urbanístico que aprobó el pleno en 2014, según ha informado la Agencia Europa Press.

La resolución de la Delegación Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en Almería, del pasado día 12 de noviembre, ha admitido a trámite la evaluación ambiental estratégica simplificada de la innovación del PGOU. Según la resolución, esto “paliará un déficit de establecimientos de este tipo en la zona de la parada de autobuses a las calas, que a buen seguro dará un necesario servicio a turistas y a los habitantes de las viviendas de la zona” y señalaba que no contravenía ni el Plan de Ordenación Territorial de Andalucía (POTA) ni el Plan de Ordenación Territorial de la Aglomeración Urbana de Almería (POTAUA).