Más 11.000 personas han mostrado su negativa a la construcción de dos hoteles rurales en suelo del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, en la barriada de Rodalquilar, y se han adherido a la campaña de recogida de firmas a través de change.org, la plataforma de peticiones más grande del mundo. “Rodalquilar podría ser la nueva víctima de las políticas que promueven el desarrollo urbanístico en vez de apostar por la conservación y protección de un paraje natural único”, sostienen.

El Ayuntamiento de Níjar ha admitido a trámite los proyectos de actuación de estos dos hoteles en Rodalquilar, cuyos promotores pretenden levantar en suelo clasificado como no urbanizable, de especial protección, por encontrarse dentro del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar.

“Para que dichos proyectos vean la luz del día, aún deben contar con la autorización ambiental unificada por parte de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía y la declaración de utilidad pública o interés social por parte del Ayuntamiento de Níjar” recuerda la petición de adhesión que han suscrito con su firma los opositores de estos dos complejos turísticos.

Los firmantes se oponen porque ambos proyectos se pretender realizar “en zona C1, zona de cultivos agrícolas y, por tanto, se trata de suelo no urbanizable, tal y como prevé el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales) por el que se rige el Parque Natural de Cabo de Gata”.

Y añaden: “Es innegable que ambos proyectos aumentarían la presión turística y, por tanto, incrementaría la contaminación ya que además del proceso de pavimentación, creación de aparcamientos, compactación del terreno, construcción de piscina, se suma el aumento del tráfico no solamente de los turistas sino también de los empleados, de los proveedores y empresas de mantenimiento, incrementa por supuesto la cantidad desechos y el consumo de energía”.

“No podemos permitir que se hagan más hoteles y menos aún en zonas protegidas, por muy pequeños que sean, su impacto sólo puede ser aún mayor ya que sólo incita a los demás propietarios de cortijos en convertirlos en hoteles. Lo atractivo del parque natural de Cabo de Gata es precisamente su entorno virgen, su naturaleza y belleza en puro estado. Los turistas que vienen aquí buscan un espacio que, por ahora, constituye una excepción del litoral español. Si permitimos esta urbanización del Parque, perderemos su esencia y se acabará dañando tanto que nadie lo podrá disfrutar”, señalan en su petición.