El alcalde de Vera, José Carmelo Jorge Blanco, ha realizado un videocomunicado en el que señala como "un alivio para todos" la apertura, a partir de este viernes, de la actividad económica no esencial y la hostelería en el municipio, tras más de un mes de cierre de la misma, al haberse producido un descenso en la tasa de contagios, situándose ya por debajo de los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes, y al mismo tiempo ha pedido "un último esfuerzo" para conseguir bajar de la tasa de 500 y reabrir el perímetro.

Vera ha entrado, con las nuevas medidas, en la modulación de alerta 4 en grado 1, lo que supone la reactivación del comercio de Vera, ya que todos los negocios podrán volver a abrir sus puertas a partir de este viernes.

"Tras más de un mes de cierre de la actividad comercial no esencial y la hostelería, esta noticia representa un alivio para todos", apuntaba Jorge Blanco, quien afirmó que "somos conscientes de las pérdidas económicas irrecuperables que este cierre ha ocasionado a los comercios y empresarios de Vera", ante lo cual anunció que "en los próximos días publicaremos nuevas líneas de ayuda al comercio y la hostelería, como ya hicimos durante la primera fase de la pandemia".

"Este Ayuntamiento que presido, así como toda la corporación municipal, estamos en estos momentos al lado de nuestros pequeños, medianos y grandes empresarios, de nuestros autónomos, y del resto de vecinos afectados, de un modo u otro, por esta situación tan desagradable que nos ha tocado vivir", continuaba el regidor veratense.

"Es por ello que mostramos nuestro firme compromiso para ayudar a los comerciantes y empresarios de Vera a salir de esta situación, y les aseguramos que, dentro de nuestras competencias, como no podía ser de otra manera, seguiremos apoyándoles en cuantas actuaciones puedan conllevar a una rápida resolución de esta situación que tan mermada está dejando la economía local", proseguía.

"A la vista de los datos de incidencia acumulada que venimos registrando en las últimas semanas, donde la tasa de contagios viene siendo reducida de manera gradual en los últimos días, queremos pedir un último esfuerzo para conseguir bajar cuanto antes de la tasa de 500 casos por cada 100.000 habitantes, que será la que nos permita abrir el municipio y eliminar las restricciones de horario comercial", añadía.

El alcalde de Vera ha reconocido que "la situación sigue siendo grave, nuestro pueblo sigue estando cerrado perimetralmente y los comercios seguirán teniendo restricciones horarias hasta que no seamos capaces de disminuir aún más los casos" ha pedido "colaboración y cumplir las normas, ya que evitar brotes que supongan un retroceso es una cuestión de responsabilidad y de solidaridad con el resto de la población. Prevenir la propagación del virus es una labor de todos".