Personal del Área de Obras y Servicios Urbanos del Ayuntamiento de Vícar están procediendo en estos días al acondiciona miento de una parte del muro del CEIP Nuestra Señora de la Merced, en la barriada de Los Canos, que se vio afectado como consecuencia de las pasada lluvias, llevando a su agrietamiento con el correspondiente peligro de derrumbe. El alcalde de Vícar, Antonio Bonilla, que visitó ayer las obras para comprobar el estado en que se encuentran, aludió a la importancia de esta actuación "destinada a fortalecer esta zona del muro perimetral en la que el agua caída se ha filtrado y provocado un cierto desplazamiento del terreno, afectando también al arbolado del patio del colegio". Un arbolado, todos ficus, que ha sido retirado y trasladado para su plantación en otros puntos del municipio.

Las obras, en una primera fase, afectan a un tramo de unos 20 metros del muro perimetral del centro educativo, en la fachada que da a la Avenida del Guadalquivir, donde los trabajadores municipales han comenzado a rellenar el espacio dejado por la retirada del arbolado y a reconstruir el propio muro hasta la altura del vallado metálico, que también será repuesto, demás de proceder al pintado del mismo.

La actuación será aprovechada para dotar a la acera de nuevos bordillos y enlosado. Como ha señalado el alcalde, "a esta obra seguirá próximamente una similar en otra parte del muro, que aunque en menor medida también se ha visto afectada, haciendo necesario una actuación que permita mejorar la seguridad dentro y fuera del recinto educativo".

Antonio Bonilla destacó también tras la visita que el coste extraordinario de estas obras "se remite tan solo a los materiales, ya que tanto el personal como la maquinaria utilizada son municipales, que es una de las ventajas de la gestión pública que desde este equipo de gobierno venimos defendiendo".