Tal y como anunció hace unos días el alcalde del Ayuntamiento de Vícar, Antonio Bonilla, los ciudadanos de esta localidad del Poniente podrán visitar en los dos cementerios de Vícar, San Benito y Piedra Rodá a sus seres queridos ya fallecidos, con motivo de la Festividad de Todos los Santos y los Difuntos, si bien deberá seguir de forma escrupulosa el protocolo establecido para evitar aglomeraciones y posibles brotes de COVID-19. A lo largo de la última semana, los trabajadoras del Área de Servicios Urbanos han llevado a cabo una limpieza, desinfección y acondicionamiento, en profundidad, tanto de los accesos como del interior de los dos camposantos, que durante el sábado, domingo y lunes, mantendrán abiertas sus puertas desde las 9 de la mañana y hasta las 19.30 horas.

Dentro del protocolo establecido y junto al obligatorio uso de mascarillas durante toda la estancia en el recinto, y el mantenimiento de la distancia de seguridad con los demás visitantes, se ha establecido una limitación de tiempo de permanencia en el recinto, no pudiendo exceder la visita de treinta , con una presencia máxima cuatro miembros de la misma familia o de cada unidad de convivencia, de manera simultánea. Asimismo, el Ayuntamiento dotará a las instalaciones de dispensadores de gel hidroalcohólico, tanto a la entrada como a la salida ,y dispondrá un dispositivo de vigilancia y control para garantizar el cumplimiento de todas las normas de seguridad.

Antonio Bonilla, ha remarcado que el objetivo de estas medidas es el de garantizar la seguridad y la salud de todos los vecinos de Vícar durante su estancia en los cementerios y en este sentido ha hecho un llamamiento para que las visitas tanto al cementerio de la Villa, como al de Piedrá Rodá, se realice de manera escalonada, para evitar aglomeraciones de última hora, con el riesgo que ello conlleva. “Apelo a la prudencia y a la actitud responsable de nuestros vecinos y vecinas, en el convencimiento de que todos los que visiten nuestros cementerios en estos tres días seguirán fielmente los protocolos, conocedores de la difícil situación por la que estamos atravesando”.

La medida más llamativa es la limitación de la permanencia en los camposantos, que no podrá exceder de treinta minutos, estando autorizada solamente la presencia simultánea de cuatro miembros de la misma familia o de cada unidad de convivencia. Durante la estancia en las instalaciones funerarias será obligatorio mantener la distancia de seguridad con los demás visitantes y será obligatorio el uso en todo momento de mascarillas.