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El acusado de Pioz pide perdón por los crímenes pero dice que tenía la idea de cometerlos

  • La Fiscalía pide prisión permanente revisable para Patrick Nogueira, que mató a sus tíos y a sus primos de uno y cuatro años, asegura que gracias al alcohol veía "sombras" y distorsionaba la realidad.

Patrick Nogueira, el asesino de Pioz.

Patrick Nogueira, el asesino de Pioz. / Pepe Zamora, EFE

Patrick Nogueira, el asesino confeso de sus tíos y sus primos de 1 y 4 años en agosto de 2016 en una vivienda de la localidad de Pioz (Guadalajara), ha afirmado que "tenía idea de hacerlo, pero no sabía cómo" y ha pedido perdón a su familia por el cuádruple crimen.

Ante un jurado popular, formado por siete hombres y dos mujeres, en el juicio que se celebra desde este miércoles en la Audiencia Provincial de Guadalajara, Nogueira, de nacionalidad brasileña, solo ha querido responder a las preguntas de su abogada, Bárbara Royo, y ha asegurado que le hubiera gustado evitarlo si hubiera podido.

Esposado, con una camisa azul, pantalón beige, gafas y muy cambiado respecto a las imágenes que se conocen de él, Nogueira, de 21 años, ha reconocido que su infancia no fue buena, con burlas y acoso por parte de sus compañeros de colegio, y ha dicho que desde muy pronto empezó a beber, hasta el punto de considerarse un adicto a la bebida.

"No puedo cambiar las cosas y no he elegido funcionar de la forma en que lo hice", ha sido su alegato en el inicio de su declaración y se ha defendido al asegurar que gracias al alcohol, veía "sombras" y distorsionaba la realidad.

Nogueira ha señalado, a preguntas de su abogada, que se sintió como cuando agredió a su profesor (en 2013), "que se acumulaba todo como una bola de nieve que iba a explotar por un sitio o por otro" y ha manifestado que "sentía mucha rabia" que le desequilibró, produjo ansiedad y le quitaba el sueño, por lo que consume alcohol.

Ha señalado que si bien la relación con su tío era buena cuando llegó a España, a quien ayudó con la manutención y gastos de la familia, posteriormente empeoró cuando su tío le quitó dinero e incluso llegó a amenazarlo con denunciarle ante extranjería y hasta tuvo que asumir deudas de él en el piso que compartían.

"Sabía lo que quería hacer, pero no cómo debía pasar", ha señalado en relación a los asesinatos de sus tíos y primos, y ha asegurado que le gustaría controlarse, porque es el motivo "de que haya tirado todo a la basura".

En este punto, ha manifestado que aceptaría tomar algún tratamiento o fármaco para poder controlarse.

Actuó fríamente y con predeterminación

Por su parte, la fiscal jefe de la Audiencia de Guadalajara, Rocío Rojo, ha calificado al supuesto asesino de "calculador" y ha dejado claro que actuó fríamente y con predeterminación.

"De arrebato, ninguno", ha dicho, y ha señalado que se preparó para cometer los crímenes que planificó de forma "fría, calculada y premeditada" y que también intentó ocultar los cuerpos además de no colaborar nunca.

Estas mismas posturas han defendido dos de las acusaciones particulares, las de Marcos y Janaina, los dos tíos asesinados, respectivamente, a la que se suma la acusación particular ejercida por el propietario del chalé alquilado.

La fiscal ha señalado que el acusado tiene una "amnesia parcial" al no recordar precisamente los momentos exactos en los que atacó a sus cuatro víctimas, por la espalda y sin que pudieran defenderse.

Tanto el Ministerio Fiscal como los abogados de la acusación han destacado lo "terrible" de aquellos mensajes enviados a su amigo, en el que además insultaba y vejaba a las víctimas.

"Es prácticamente imposible incluir más agravantes porque todos están presentes en todos los hechos", ha agregado Alberto Martín, el abogado que representa al hermano del fallecido, y ha señalado que "es el crimen más horrible y espeluznante" que ha conocido.

Un daño cerebral que predeterminó su conducta

Por su parte, la defensa del acusado ha afirmado que su defendido tiene un daño cerebral que predeterminó su conducta y se ha dirigido al jurado popular que le juzga para decirle que su cliente "no es como ustedes, tiene un daño cerebral, una anomalía que le merma sus facultades".

Ha querido dejar claro que su intención no es "hacer pasar" al acusado por "loco", sino demostrar con los informes que los psiquiatras han elaborado que éste sufre un problema cerebral y debe ser condenado acorde a ello, que debe ser considerado como atenuante, al igual que debe tenerse en cuenta que se entregara voluntariamente y confesara, ha añadido.

En opinión de su defensa, "una prueba irrefutable de que no es una persona con un cerebro normal son las fotos y mensajes que mandó a su amigo", además de los terribles crímenes que cometió.

Tanto Ministerio Fiscal como acusaciones particulares solicitan prisión permanente revisable mientras que la defensa pide 7 años y seis meses por cada uno de los asesinatos de los dos niños y 5 años por los homicidios de sus tíos.

Los hechos que se juzgan ocurrieron el 17 de agosto de 2016, cuando Patrick Nogueira acudió al chalé de Pioz donde vivía su tío, Marcos Campos, la mujer de éste, Janaina Santos, ambos de 39 años y procedentes de Brasil, y sus dos hijos, de 1 y 4 años de edad, y acabó con la vida de su familia.

A los dos adultos los mató, descuartizó y metió en bolsas de plástico y a los dos niños, tras asesinarlos, los guardó también en bolsas de plástico.

Los cuerpos sin vida de los cuatro miembros de la familia no fueron descubiertos hasta un mes después, en concreto el 17 de septiembre de 2016, cuando un empleado de mantenimiento alertó a los vigilantes de seguridad de la urbanización del mal olor que procedía de la vivienda.

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