Este año la celebración del Black Friday, el viernes más popular a nivel de consumo del año, recaerá sobre el día 26 de noviembre de 2021, coincidiendo con la tradición de celebrarse el día posterior al Día de Acción de Gracias de Estados Unidos, el cual recae anualmente sobre el cuarto jueves de noviembre. 

Durante el año 2020, ya podíamos encontrar en numerosos plataformas y establecimientos las ofertas que estos tendrían durante esta campaña, la cual marca el inicio de la temporada navideña a nivel comercial. Este año será el segundo año consecutivo en que la celebración coincida con la pandemia del coronavirus, por lo que existen una serie de razones, nada desdeñables, para aprovechar las múltiples ofertas de este día para realizar nuestras compras de Navidad y Reyes Magos.

Problemas de transporte marítimo y suministro

Las compañías de transporte de mercancía a domicilio llevan meses anticipándose a una campaña donde se esperan cifras récord de ventas a nivel histórico. No en vano, durante el año 2020, estas empresas movieron hasta 50 millones de envíos solamente durante el Black Friday. Además, la pandemia del coronavirus también ha propiciado un crecimiento sin precedentes de las ventas online por lo que este 2021 se espera también un aumento de este tipo de compras. 

La crisis sanitaria y el colapso del transporte marítimo está provocando un desabastecimiento a nivel global que está repercutiendo incluso en una subida generalizada de los precios. El problema radica en que la demanda de transporte marítimo a nivel internacional ha superado con creces al de la oferta por lo que el servicio ha terminado colapsando. Si a esto unimos que el COVID-19 está provocando cierres y paralizaciones en los países encargados de los suministros nos encontramos en una situación crítica.

Algunas marcas como Nike o Adidas se han encontrado con grandes problemas de producción en sus fábricas pertenecientes al sudeste asiático, donde la cepa delta del virus está causando una producción mínima. A todo ello se une el colapso logístico mundial en las principales rutas marítimas, como las de Asia y Europa o Estados Unidos. Una de las razones se halla en la disminución del nivel de los barcos que se encuentran disponibles, sumado al colapso de los puertos que, debido también a la pandemia, se ven con retrasos de dos y tres semanas para descargar.

Este desabastecimiento así como los retrasos en el transporte marítimo provoca que haya menos stock disponible de los productos y la oferta disponible se vea afectada por una subida de precios. Por ello, lo más recomendable es adelantar las compras de Navidad todo lo pronto que podamos, aprovechando incluso las grandes ofertas del Black Friday, dado que las circunstancias provocarán una subida de precios y un desabastecimiento en el stock de mucho sectores.