I+D+i

Innovación en el ADN

  • La unidad de investigación de Acerinox trabaja en la producción de nuevos aceros para distintos usos, optimizaciones de proceso, el análisis de nuevas aplicaciones y la valorización de residuos

Equipo de la unidad de investigación de Acerinox Europa

Equipo de la unidad de investigación de Acerinox Europa / Erasmo Fenoy

Los Barrios, 1985. Acerinox desarrolla el primer tren de laminación en caliente Steckel para uso exclusivo de aceros inoxidables, un hito en un camino, el de la investigación y desarrollo, que le lleva hoy a estar trabajando en los materiales que en un futuro cercano permitirán reducir las emisiones en automoción o construcción, contar con equipos industriales más resistentes o lograr un material antibacteriano a un precio competitivo. Esos son algunos de los proyectos actuales de la unidad de investigación de Acerinox, creada hace 35 años en la factoría de Los Barrios y que cuenta en la actualidad con la labor de 160 personas de la fábrica para lograr una mejora continua en la producción de acero inoxidable.

La I+D+i ha formado parte del ADN de Acerinox desde sus inicios y esa apuesta por el desarrollo continuo se ha reflejado en el desarrollo de 130 proyectos desde la creación de la unidad de investigación. Los resultados de esas iniciativas forman parte de los aceros que se fabrican en Palmones y muchos de los avances generados en la factoría se han acabado convirtiendo en tecnologías estándar para la fabricación de inoxidable. Con la eficiencia en el uso de los recursos por bandera, actualmente la unidad, única diferenciada en el grupo Acerinox hasta la integración de VDM Metals, está trabajando en más de 20 proyectos en líneas de actuación consideradas estratégicas. Así, se investiga para la puesta a punto de nuevos aceros y mejora de los existentes, la optimización de procesos productivos, el análisis de nuevas aplicaciones o la valorización de residuos.

Los resultados de estos proyectos tendrán múltiples aplicaciones en la vida diaria de los ciudadanos. Bajo el nombre de Raijin, por ejemplo, se desarrolla una investigación que trata de proporcionar mediante tecnologías láser nuevas funcionalidades al acero, como hidrofobicidad, resistencia al desgaste o propiedades antibacterianas, además de color. El material resultante sería ideal para aplicaciones sanitarias, de la industria alimentaria o para restauración, un producto resistente y limpio que no existe hoy a escala comercial. También tendría una aplicación sanitaria el producto resultante del proyecto Duplexfin, que trata de conseguir un espesor muy fino en un acero con excepcionales propiedades mecánicas y muy resistente a la corrosión, que permitiría mejorar los sistemas de agua sanitaria, transporte de líquidos, hospitales.

Robot de ensayos mecánicos en Acerinox Europa Robot de ensayos mecánicos en Acerinox Europa

Robot de ensayos mecánicos en Acerinox Europa / Erasmo Fenoy

El sector del automóvil y la movilidad es uno de los objetivos de otros dos proyectos de investigación (Ultraslim y Qpinox), que buscan conseguir aceros más ligeros, para actuaciones en las que el aligeramiento de peso de las estructuras es importante, pero también tener las mejores propiedades mecánicas. Aceros que permitirían reducir las emisiones de los vehículos al tiempo que los hacen más resistentes, reducir costes en el transporte o construir infraestructuras energéticas más ligeras y eficientes.

Otros planes en desarrollo buscan mejorar el proceso de fabricación del acero, la eficiencia energética o mejorar algunos aspectos del producto. Contar con una unidad propia de investigación permite además a Acerinox sacar un rendimiento inmediato de esas innovaciones: estas se ponen en producción directamente tras su validación.

En esa labor investigadora es clave la colaboración de todos los trabajadores de la empresa, que forman parte del proceso de mejora continua que ahora se conoce como innovación. Pero también participan en él otros actores del mundo del inoxidable: otras empresas, proveedores, los usuarios finales. En un mundo globalizado, los socios pueden ser múltiples y estar en cualquier punto y así buena parte de los proyectos se realizan en colaboración con centros de investigación de toda Europa y empresas repartidas por España, y sobre todo con el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) del Ministerio de Ciencia y Tecnología. También hay múltiples proyectos con universidades de todo el país.

Desde su puesta en marcha en 1985, la unidad de investigación ha desarrollado más de 130 proyectos

Precisamente con una universidad, la de Córdoba, se está llevando a cabo una importante línea de investigación, la que trata de lograr la valorización de los residuos de la acería. Bajo el nombre de Escorinox se intenta demostrar las ventajas del uso de las escorias como sustitutas de los áridos naturales en la fabricación de cemento y hormigones de distintos tipos. Si da resultado, habría un doble beneficio ambiental: por un lado, se evitaría enviar a vertedero ingentes cantidades de escorias, mientras que por otro ahorraría la extracción en minas y canteras de esa misma cantidad de material.

Un ejemplo más de economía circular en una factoría que la tiene en su base desde mucho antes de que se convirtiera en un concepto clave para la industria europea: las bobinas, flejes, barras de acero inoxidable producidas en las fábricas de Acerinox, que se convierten en coches, edificios, cuberterías, aviones, puentes o electrodomésticos, terminan volviendo a las plantas en forma de chatarra para ser refundidos. Al final del proceso productivo, un objeto de acero inoxidable vuelve a tener en su composición un índice de contenido reciclado del 91%. En este sentido, también se trabaja en proyectos de innovación orientados a reducir los consumos de agua y energía y en recuperar los elementos presentes en las aguas al final de su uso en la factoría.

Un robot en la salida de la línea AP5 Un robot en la salida de la línea AP5

Un robot en la salida de la línea AP5 / Erasmo Fenoy

El mundo universitario tiene presencia en el día a día de la compañía en otra vertiente: la Cátedra Acerinox de la Universidad de Cádiz (UCA). Cientos de alumnos han hecho sus prácticas en las instalaciones de Los Barrios, en muchas ocasiones participando en las investigaciones en marcha. Otra fórmula de colaboración es la firma de convenios específicos para que personal de la Universidad o de la empresa desarrolle sus tesis doctorales en la UCA a partir de proyectos de investigación conjuntos, una forma de aunar las necesidades de la compañía y la labor investigadora universitaria. En estos momentos se están desarrollando cinco tesis mediante este sistema. Hay otra forma más de conexión universidad-empresa: profesionales de Acerinox participan como profesorado externo en el Máster de Ingeniería Industrial de la Escuela Politécnica de Algeciras.

El impulso a la investigación en Acerinox se refleja también fuera de las instalaciones de la multinacional. Así, patrocina proyectos de organismos de investigación públicos de interés para la sociedad. Es el caso del Estudio ecológico, de impacto ambiental y de medidas de mitigación del alga exótica explosiva rugulopteryx okamurae en la Bahía de Algeciras y el Estrecho. O el proyecto 4R-Photoslag, que permite estudiar la conversión de residuos industriales en productos con capacidad fotocatalítica, que reducen la polución en las ciudades al aplicarlos en pavimentos y edificios mediante un proceso similar a la fotosíntesis: al igual que esta, gracias a la luz solar, es capaz de eliminar CO2 para generar materia orgánica, la fotocatálisis elimina otros contaminantes habituales en la atmósfera, como son los óxidos de nitrógeno y de azufre o los compuestos orgánicos volátiles mediante un proceso de oxidación activado por la energía solar.

El camino de la investigación en Acerinox sigue avanzando con la integración de VDM Metals. La división de aleaciones de alto rendimiento abre nuevas oportunidades de investigación en materiales que hasta ahora no se fabricaban en el grupo. Otra puerta abierta para un afán innovador que dura ya medio siglo.

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