El Acebuche acoge la proyección del corto del periodista Jorge Pastor en el que la protagonista del libro de García Lorca rompe con el rol que tiene prefijado.

“Sin tiempo para morir. Preparemos la madurez con la mente y el cuerpo” se ha celebrado en El Acebuche del 12 al 14 de julio.

Se trata de una actividad puesta en marcha por la asociación socio-cultural ‘La Guajira’ para llevar este verano la música a “otros escenarios” y “nuevos públicos, utilizando el flamenco como “altavoz para generar experiencias en el gran público y con colectivos especiales con difícil acceso a este tipo de actuaciones”.

Precisamente, en el centro penitenciario El Acebuche dos psicólogas sanitarias, Luisa Pardo y Andrea Sainz-Maza, comenzaron este martes un curso de dos jornadas para promover la prevención y el "alejamiento" de las conductas preventivas entre los internos de la Unidad Terapéutica y Educativa (UTE) y mujeres presas de otros módulos.

Tras dos años sin poder hacerlo por la covid-19, el salón de actos de la prisión ha acogido una fiesta para celebrar este momento.

“Es una experiencia enriquecedora, maravillosa, bonita… No tengo palabras”, dice sobre su estancia en la UTE, asegurando que aquí ha vuelto a ser “feliz”, añadiendo que ha podido recuperar a su mujer. “Puedo estar preso de libertad pero no de amor, mi corazón es feliz”, asevera uno de los internos.

Las internas participan en un taller de meditación y pensamiento positivo.

Miembros de la Asociación de Educación de Excluidos Sociales ‘Busola’ visitan esta semana El Acebuche y el CIS de El Puche.

Por unos días, los reclusos se han "sentido como niños" y han esforzado su imaginación para participar en una actividad de ocio y tiempo libre que se enmarca en las actividades de tratamiento del centro.

La obra de carácter litúrgico tendrá lugar el viernes 1 de abril a las 21:00 en la parroquia de San Antonio de Padua.