Apple ha asegurado que le corresponden 2.525 millones de dólares (2.089 millones de euros) de compensación en su batalla contra Samsung Electronics por las patentes tecnológicas usadas en tablets y teléfonos inteligentes. Según un documento presentado este martes ante un tribunal federal de San José, California, Apple cree que Samsung le debe compensaciones "monetarias sustanciales" ya que en su opinión la empresa surcoreana ilegalmente "eligió competir copiando" sus productos y tecnologías.

Apple ha señalado que esto permitió a Samsung superarle como el mayor fabricante de teléfonos inteligentes y conseguir "miles de millones de dólares en beneficios". Además, la compañía estima que el éxito de su rival ha supuesto la pérdida de 500 millones de dólares a sus ganancias.

La firma fundada por Steve Jobs ha señalado que los daños, incluyendo daños razonables por derechos de autor, alcanzan "un total combinado de 2.525 millones de dólares". Los de Cupertino también ha señalado que planea una medida permanente para evitar futuras violaciones.

Samsung ha contestado a las acusaciones de Apple en un documento presentado 13 minutos más tarde, en el que ha acusado a la empresa creadora del iPod, de tratar de "ahogar la competencia legítima y limitar la elección del consumidor para mantener unos beneficios que históricamente han sido desorbitantes".

La empresa surcoreana ha destacado que Apple debería pagar por usar la tecnología patentada de Samsung "sin la cual Apple no podría haberse convertido en un participante exitoso en la industria de las telecomunicaciones". Ambas firmas tienen fijado un juicio el 30 de julio ante la juez de distrito Lucy Koh.

Su disputa forma parte de una batalla legal a nivel mundial sobre el supuesto robo de tecnología usada en teléfonos móviles inteligentes y tablets, entre ellos los que funcionan con el sistema operativo Android de Google, que Samsung usa en sus dispositivos más populares. El presidente ejecutivo de Apple, Tim Cook, y altos ejecutivos de Samsung participaron el mes pasado en una mediación que contó con supervisión judicial para tratar de resolver el caso pero un acuerdo pareció poco probable, según una persona familiarizada con el asunto. Además, las empresas también están enfrentadas por el valor de las patentes en disputa, según otra de las fuentes.