Toros

Un bravo encierro manda a la enfermería a los tres novilleros en la Plaza México

  • Debuta Pablo Mora, antiguo alumno en convenio de las escuelas taurinas de Moralzarzal y La Gallosina de El Puerto

El mexicano Román Martínez se alzó como triunfador en la novillada de la tarde del domingo, noche en Europa, en la Monumental Plaza México, tras cortar una oreja y sufrir una cornada en el muslo derecho, mientras que su compatriota Héctor de Ávila recibió un golpe en la clavícula, con posible fractura y el español Pablo Mora, de Moralzarzal, antiguo alumno en convenio de las escuelas taurinas de Moralzarzal y La Gallosina de El Puerto de Santa María, que mató tres novillos, sufrió un impresionante revolcón.

Con una entrada floja y un tiempo frío, en la que destacó una ligera llovizna al principio, se lidió una novillada excelentemente presentada de la ganadería de Medina Ibarra, brava en su conjunto, que obligó a que los tres toreros pasaran por la enfermería, al sufrir diversos percances. El mejor astado fue el segundo.

De Ávila, con el que abrió plaza, anduvo indeciso y sin disposición. Mató pronto y obtuvo silencio. Con el cuarto se vio mejor aunque sin firmeza, silencio. Toreó al quinto, en lugar de Martínez, con el que estuvo más decidido. Aunque tuvo momentos buenos, al torear de muleta sufrió un revolcón, que le obligó a pasar a la enfermería. El torero está pendiente de realizar un estudio de la clavícula derecha, por una posible fractura. Al novillo lo mató finalmente el español Pablo Mora.

Román Martínez salió muy dispuesto con faroles de rodillas y un gran quite por gaoneras. Con un magnífico novillo, el diestro logró los mejores muletazos tanto con una mano como la otra, logrando algunos naturales estupendos. Mató de media y en el acercamiento lo cogió su enemigo. El astado dobló y le fue otorgada una oreja. Aunque no todo fue perfecto, la decisión también tiene que premiarse. Se informó que sufre una cornada en el muslo derecho grande, pero de las llamadas limpias.

Pablo Mora, con el tercero estuvo bien, pero sin conectar. El diestro español que sabe el oficio y tiene técnica, mató pronto y fue premiado con palmas. Con el sexto, faroles de rodillas y al rematar sufrió una impresionante cogida, aunque por fortuna solo fueron golpes contusos. Se esperó a que se repusiera de la paliza y aunque logró momentos estupendos, mató regular y fue ovacionado.

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