Las visitas a Miranda de Ebro no son precisamente agradables para el Almería. Anduva es uno de esos campos de fútbol irreductibles para la gran mayoría de equipos que lo visitan, especialmente para los indálicos. Cuatro desplazamientos a tierras burgalesas, todas en la última década en Segunda División, y ni una sola victoria. Allí tendrán que tratar de enderezar el rumbo los de Gomes este domingo, si quieren encarar el play off desde la ventajosa tercera plaza.

Desde su primera gran participación en Copa del Rey, con Pablo Infante como futbolista más recordado, el Mirandés se ganó el cariño de los aficionados al fútbol español, que veían en los rojillos al conjunto de fútbol de barrio que tanto admiran los que están en contra de la Superliga de Florentino. El gesto se les torcía cuando su equipo jugaba en Anduva, puesto que era un suplicio aguantar las acometidas, una tras otra, de un conjunto burgalés que tiene en su estadio su gran potencial.

Ni el propio Almería de Javi Gracia la temporada del ascenso fue capaz de salir con una sonrisa en la boca de allí. Un gol de Díaz de Cerio en la primera mitad servía a los locales para coger ventaja y aguantar con orden las intentonas de Charles, Falqué Vidal, Soriano... Era la primera visita a Miranda de Ebro, en 2013, y la primera vez que los almerienses se volvían con el rabo entre las piernas.

La segunda llegó con Fernando Soriano en el banquillo, en diciembre de 2016. Los indálicos, ya metidos en problemas en la zona baja, visitan Anduva en la última jornada del año. Se las prometían felices con el gol inicial de Quique, pero a los burgaleses les bastaron dos arreones en diez minutos para poner el 2-1 final, gracias al acierto de Álex Ortiz y Maikel Mesa. En la segunda vuelta, eso sí, el Almería fue capaz de darle la vuelta a la tortilla con Ramis en el banquillo y lograron la salvación a costa precisamente del Mirandés, al que derrotaron en la penúltima jornada.

Mesa hace el 2-1 en la temporada 2016-17.

Esos son los malos recuerdos de las visitas a Miranda de Ebro, también los hay regulares. Dos empates ha sido capaz de lograr el equipo almeriense. El primero en el debut de Gorosito en el banquillo tras cesar a Joan Carrillo, para estrenar el año 2016. Kijera adelantó a los rojillos y Morcillo, de cabeza, puso el 1-1 para los que ese día vestían de azulón.

Gorosito y la sociedad portuguesa Silva& Nandinho debutaron en el banquillo de Anduva

Nuevamente de azul, pero de peculiar azul de la pasada temporada, el Almería rascaba su segundo punto en Anduva, ahora con el debut de la sociedad Mario Silva&Nandinho como sustitutos de Guti. Vada y Corpas adelantaron en dos ocasiones a los indálicos, pero primero Guridi y en el último segundo Merquelanz [gracias a uno de los varios penaltis absurdos de David Costas] empataron para los locales. El 2-2 servía de poco para un Almería que ya mostraba su flaqueza del tramo final del pasado campeonato.

Mara remata de cabeza la pasada temporada.

Un año después, el proyecto de Turki vuelve a Anduva en busca de un buen resultado que corte la mala racha y que le vaya dando la confianza que tanto necesita para afrontar el play off. Miranda es territorio comanche para los rojiblancos, pero la esperanza es que el Mirandés está metido en una dinámica similar a la UDA.